Somos la (sub) cultura de nuestros actos

 

Re-cito

…"la cultura es... organización, disciplina del Yo interior..."

Antonio Gramsci

 

Es lamentable que el I Simposio Pensamiento Crítico Nuestroamericano a celebrarse en Mérida los días miércoles 7, jueves 8 y viernes 9 de julio de 2016, haya sido cancelado por la institución promotora con la frase histórica del Comandante Chávez suspendido "por ahora".

En nosotros/as esas prácticas de suspender eventos de todo tipo y pelaje es ya una práctica reiterada, un hábito, casi una consigna del "proceso". Es nuestra naturaleza política subdesarrollada y tan evidente en la izquierda revolucionaria en pleno ejercicio del poder popular, porque cuando fuimos oposición en la IV República éramos disciplinados en émulo del ejército bolchevique con la diana siberiana, por aquello de que somos modelos y modeladores sociales, culturales y políticos.


"Una suspensión mas no importa", dirá el encargado de la organización del programa suspendido sin explicaciones a los embarcados y potenciales participantes al acto promocionado por propios y solidarios con el evento universitario GranNacional.

Esa ignorancia con "el otro y la otra" desconoce el saber popular del soberano que afirma que "de grano en grano el gallo y la gallina se llenan el buche" de arrechera, y un día – como en el diciembre pasado- el pueblo que nunca se equivoca nos cobró las facturas no canceladas por tanto retardo e incumplimiento con el mandato de la palabra seria y comprometida que hicimos publica en diciembre de 1998 y que al parecer –por los hechos- embarcó a propios y extraños. Por las obras se conoce nuestros actos, es un pensamiento harto utilizado por el suscrito.

Obviamente que la oposición tramposa y apátrida nos ganó con nuestras propias reglas constitucionales y con todo el poder todo para el pueblo y de ñapa con una chequera cuyo saldo era azulito contante y sonante de 100 mil millones de bolos petroleros, obtenido gracias al modelo fiscalista que nadie – de los nuestros- dijo en sus momento de vacas gordas era maluco todavía, excepto DAR, Pablo Pérez Alfonzo y Valmore Rodríguez, todos adecos antes de 1958 que lo dijeron y lo declararon como una sentencia escrita en letras pétreas. Lo leíamos, lo sabíamos, lo escribíamos y lo decíamos, pero nos hicimos los pendejos y en plena quiebra económica del país, le echamos las culpas de nuestros errores y desaciertos al modelo rentista petrolero.


Nuestros fracasos y malas aciones de gobernantes sin decisión se limpiarían de culpa histórica al replicar al Prefecto romano de la provincia de Judea, Poncio Pilatos. Nos lavamos las manos y nos decalaramos inocentes de toda inocencia y responsabilidad sobre lo que hicimos, que obviamente no todo fue malo. Denunciar al modelo fiscalista como el demonio es una caribera criolla. No hemos buscado a Judas para asignarle alguna responsabildad porque todavía decimos a píe juntillas que falta gobierno hasta el año 2019, mínimante.

Gobernamos sin problemas hasta que el imperio dijo "Ya está bueno ya" y nuestros corruptos dijeron: "con lo mío no te metas" yéndose "pal" norte a cantar en "sus ranchos" que no eran de cartón. Mandamos sin auditoría social y una contraloría que olvidó el decreto ejemplarizante de Bolívar en Lima, fechado en 1823, que declaraba la muerte al funcionario público que se robara diez pesos del fisco nacional… "diez piches pesos".

Regreso al motivo de esta nota. Que va a importar si un evento no se hace, así somos y perdonen mi costosa solidaridad personal con las promesas anunciadas, suspendidas, pospuestas o realizadas cinco hora después, cuando el funcionario de más alta envestidura – seguramente venido de la Gran Capital o del Partido- llegue al evento y se lance un apoteósico discurso de los más ejemplarizantes jamás oído, recordándonos que la revolución no tiene espera ni está a la vuelta de la esquina. Lo grave es que el supuesto personaje "de verdad" improvise un discurso que no le dice nadita al cansado auditorio que esté "articulado" con el evento y que nadie pida levanta la mano y pida la palabra –incluyéndome- para decirle a él y a los organizadores de que ninguna revolución se hace a punta de incoherencias y faltas de respeto con los convocados, que por supuesto no entienden nada porque nuestra revolución se puede dar el lujo esperar para otro día.

Posiblemente haya necesidad de preguntarle al camarada que está en los puestos delanteros del auditorio dirigiendo una barra que no se cansa de decir: "púyalo", púyalo y vuélvalo a puyar que pueblo unido nunca será vencido si está rodilla en tierra".. a la vin a la vao a la bin bom bao la revo la revo ra ra ra !!! " A lo mejor ese compañero si sepa con claridad lo que no está pasando.

Espero que algún camarada no me diga que salté la tanquera por lo afirmado en esta nota de un día jubilar para la Patria del Padre Bolívar o porque no he defendido la revolución en plena amanecida cola en el supermecado Yoan Lin de Mérida o en la "fila" (perdonen el eufemismo de clase media en descenso) más organizada y chic de la ciudad": Farmatodo, denunciando a la guerra económica como la culpable que declaró al país en cola permanente hasta que se cumpla la profecía del evangelio norteamericano que dice que "Cristo viene, espéralo". Porque las colas son un sufrimiento que hay que hacer para purganos de pecados en la tierra globalizada por el mercado.

Prof. Pedro Rivas

Merida, 5 de julio de 2016



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