No es solo por mirandino que dedico eventualmente unas tantas líneas para hablar de su gobernador, su desgobierno, su representación de la nada y sus acciones poco acertadas y por tanto desleales a la supra organización fantasmagórica de la derecha, la súper resquebrajada MUD. En este caso vuelve a ser inevitable que escriba sobre Henrique Capriles, el eterno soñador de la silla presidencial, el mismo que sigue atribuyéndose el rol de vocero nacional de la oposición venezolana y sigue comportándose como el eterno candidato. Más que padecer de candidatitis aguda, el personero ha tenido intenciones de apariciones muy seguidas en los últimos días, pero no como gobernador –jamás menciona al estado Miranda–, sino que por el contrario su retórica es efímeramente crítica hacia el gobierno del presidente Maduro. Le preocupan los problemas nacionales, le molesta la gestión de Nicolás, pero no hace nada para mostrar un gobierno regional más o menos eficiente que sirva de vitrina de su oferta-país y así tener moral para hablar de asuntos nacionales, y mucho más para hablar como vocero de facto de la Mesa de la Unidad en vista que hasta ahora no tiene un vocero oficial. Capriles aprovecha la coyuntura que ellos mismos atraviesan para volver a asomar la cabeza como líder único de dicha organización. Cabe entonces preguntarse: ¿Qué dice el veterano adeco Ramos Allup quien, a pesar de que le cae mal Henrique, ha hecho notorios esfuerzos por apostarle a la ya quebrantada unidad? ¿Cuál será el próximo paso en política de la extrema derecha en cara de María Corina quien aspira, al igual que Radonsky, a la presidencia y, aunque es un átomo suelto en la oposición, lleva algún tiempo de bajo perfil y seguramente lo eleve ante esta zancadilla del gobernador de Miranda? ¿Qué piensan quienes votaron por Capriles o por las opciones de la oposición en los más recientes episodios electorales sobre las acciones de sus autodenominados líderes o voceros en torno a no tener ningún plan más que el de la inacción o la desestabilización permanente como únicas formas de ejercicio político?

Considero que estamos frente una crisis política de la derecha de las más severas que hayan podido atravesar en estos 15 años de Revolución. Esta situación nos hace recordar a Chávez y su repetida y enfática frase: "en Venezuela hace falta una oposición seria". Esa era, entre otras críticas constructivas, una sugerencia que hacia el Comandante como datos políticos a los fines de que se organizaran y tuvieran algún avance respetable en sus acciones políticas contrarias al Gobierno Central. Lo mismo le está sucediendo al presidente Maduro, quien carece de una oposición seria que haga críticas en el marco de la cooperación y de la coordinación de los diversos niveles de gobierno para resolver los problemas sociales de la población en cada espacio de la nación. Todo esto, a pesar de los incesantes llamados y encuentros convocados por el mismo Maduro para lograr ese espacio de construcción y trazado de líneas de acción, objetivos y tareas comunes, no se logró por la derecha –y por lo visto no habrán condiciones para reintentarlo por un buen tiempo– debido a su situación interna.

Siguen las mentiras…

Inevitable otra vez hablar del sub-vocero de facto de la oposición. Este otro señor ha brindado declaraciones en una entrevista de televisión sobre unos índices de reducción de la inseguridad y otros tantos que sirvieron como indicadores de su supuesta buena gestión, y así ser galardonado como mejor alcalde del mundo en el mes de septiembre, premio otorgado por la majestuosa fundación europea The City Mayors. Alaracas. Bombos y platillos por el premio prepagado de Carlos Ocariz, quien, por el contrario, está a punto de ser revocado por voto de las mismas personas que lo eligieron. Además de descarado, éste sí quiere –a diferencia de su amigo (Capriles) – hablar del municipio antes los medios, aunque no deja de hablar de los asuntos nacionales. Sin embargo, se le olvidó mencionar que efectivamente la inseguridad ha sido reducida debido a los esfuerzos del Gobierno Nacional con la implementación del patrullaje inteligente y la dotación de patrullas a la policía del municipio Sucre.

De la relación entre estos dos personajes de este mismo partido hay varias cosas muy extrañas. Por ejemplo, si son aliados y han demostrado ser unidos en anteriores situaciones electorales, entonces, ¿por qué no hay un mínimo de visibilización de dicha unidad en torno a sus gobiernos? Capriles aunque tiene los recursos para ayudar a Ocariz a superar la crisis de la recolección de basura, no lo ha hecho, mucho menos ha dotado de patrullas o equipamiento a la policía del municipio, ni siquiera hay registros de una acción conjunta entre ambos compañeros. Lo mismo sucede con el Alcalde Mayor, Antonio Ledezma. Ninguno de los tres se pone de acuerdo para resolver nada, no hay ni siquiera alguna declaración en conjunto en el arranque de una obra que exprese su articulación. Nada. Son la nada al final de cuento. Los perjudicados siguen siendo quienes votaron por ellos.

Periodista

@jhonathansanche