Mambrú se fue a la guerra y la ultra derecha también

Me cuesta imaginar que un sector muy reducido de venezolanos y venezolanas ande difundiendo voces de  guerra a pocos días de los comicios presidenciales. Sobre todo que den por sentado que por  “quítame esta paja” vamos a  desmoñarnos y lo anuncian como quien promociona una película.  Ahora está  por verse dónde se van a meter quienes andan estimulando semejante aberración.

No comparto la tesis de algunos camaradas que señalan a todos los seguidores de Capriles Radonski como militando en esa idea de propiciar un baño de sangre. Dentro de esa masa hay muchas personas con profunda convicción democrática; que independientemente de ejercer su derecho a disentir del proceso revolucionario no se alistan en  esa locura, en esa Vorágine a la cual convocan, entre otros Semtei, Koesling  y Goicochea.

Llama la atención que ni el candidato ni la directiva de la MUD hayan establecido clara distancia con esas  voces violentas y sanguinarias. Llama, igualmente  la atención que el señor Capriles ni si quiera ha aceptado que reconocerá el triunfo de Chávez; además de haberse convertido en el rey del “yo no fui”

Todos los antecedentes y actitudes de ese sector agresivo apuntan a que hay que estar vigilantes, aportando cada quien su participación en desmontar ese plan anti patria, las FANB, los organismos de seguridad e inteligencia, la inteligencia social, entre otras. Además es un imperativo asistir a votar, bien temprano por cierto. Mantener una conducta cívica, no caer en provocaciones, establecer los contactos y la organización necesaria para cualquier movilización rápida.

Esta ultra derecha venezolana no sólo recibe dólares y euros, sino que también siguen instrucciones para desestabilizar. No tienen ningún apego a la ciudadanía venezolana, mucho menos nada los emparenta en afecto y en amor con la gente sencilla, con los pobres, con los humildes. La clase media no les importa un carajo, basta rememorar el famoso crédito mejicano, la cuota balón; merced a lo cual muchas familias venezolanas perdieron sus casas y sus carros; y se registró más de un suicidio. Están sacando cuenta de cómo harán para caerle encima a las más de 250.000 viviendas que ya han sido asignadas a familias humildes; con el cuento de que los recursos de  PDVSA no son para programas sociales, para entregarla a la banca privada corrupta que les financia la campaña.

Esta semana debe ser de alerta máxima, “ojo de garza”, que no se escape ningún detalle sospechoso que no sea reportado al organismo correspondiente de militancia, esta derecha es perversa, comenzando por su candidato.

Tiene varios años generando o intentando generar temores en la población, creando un clima psicológico de miedo que ha impactado a muchas personas. Las campañas anti comunistas se han arreciado a través de calumnias como que le quitarán los hijos, las casas y hasta las mujeres. Afortunadamente este pueblo se ha superado en auto estima y lo demostró en abril del 2002 y durante el criminal paro petrolero.

Hay un trabajo que están haciendo en los últimos meses, en el que a partir de los miedos , presentan ese concepto amorfo y sin sustentación, de “progreso” y se motiva a quienes han mantenido bajo un entrenamiento, generando un condicionamiento conductual que  propicia euforia ante un supuesto triunfo. Luego que los tienen sumamente convencidos del triunfo, le refuerzan esa conducta. Y ahora, en este momento, están en la fase de sugestión y condicionamiento para que defiendan el triunfo de su candidato a costa de lo que sea. Incluida la violencia.

Para este trabajo se prestan profesionales de diferentes áreas del comportamiento humano. Abogados, psicólogos, sociólogos, docentes, psiquiatras, reclutados de los medios académicos en cada región. Vulnerando códigos de ética profesional, a sabiendas de las terribles consecuencias que eso puede tener. Esto es sumamente peligroso porque de allí saldrá la violencia que pronostican, con consecuencias impredecibles.

Esa es la calaña de la derecha que quiere asumir el mando del país sin misericordia alguna. “Ojo pelao que gallina no ve de noche”

rgustavogonzalezp@gmail.com


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