_¡…espejito, espejito...espejito mágico, yo quiero ser presidente pero la vaina es que el cataco se me adelantó.
_¡Jo joo jooo jooooo (to) sooooy espejito mágico y vengo a complacerte pero a cambio debes venderme tu alma, cuestión que no tienes pero me conformo que me piches un % de lo que robas en Miranda.
En primero has de saber que Chávez es como el espinito y, en segundo, no te preocupes mucho por el cataco, te basta rezar las letanías de San Cristóbal que es un santo bien bueno y rézale así:…volverá Juana Farfán/
Con Viruta y Capulina / Volverán Tintán y Marcelo /Resortes y Clavillazo/ Volverá Rin Tin Tín…/Pero adecos y copeyecos esos nunca volverán…/
_Señor Espejo, y …hay alguna prueba al respecto?
_Claro que sí hay prueba, fíjate que ya Rin TinTín está en la Asamblea Nacional.
_¡Cónfiro, no “medi” “de” cuenta!-¿Quién es el diputado Rin Tin Tín-?
_Es uno muy adelantado, tanto así que fue alcalde, apenas siendo cachorro (del imperio) y ahora es formalmente un perro diputado y los escuálidos de Zulia están orgullosísimos de él. Se le atribuye haber dicho que “…he sido un mal alcalde pero la gente vota por mí…yo sí soy un cachorro del imperio y eso me encanta…”.
_¡Eso es una maravilla!
_Bueno, Radonsky , tú sabes que Caperucita Roja es de Chacao pero además es también venezolana, ella tiene la doble nacionalidad, así que si la expulsamos de Chacao entonces ella va andar por toda Venezuela exhibiendo un retrato de Chávez y eso no te conviene para tu proyecto de unir ambos países, es que ella es roja rojita y lo demás es cuento; figúrate que hace poco un escuálido le zampó un tortazo en la cara y hasta la sangre que manó de su herida, era roja rojita, lo que revela que se trata de una infiltrada en el Chacao de sangre azul.
_Muchas gracias, Señor Espejito, por orientarme tan bueno.
_De nada. Antes de pensar en Chávez tú debes pensar en abatir a todos los candidatos de la MUD y una vez que los venzas uno a uno, estarás en condiciones de aguantar un Nocaut rocambolesco.
Recuerda que Chávez le zampó nocaut a Frijolito y lo dejó medio loco, hablando incoherencias; igual le sucedió al filósofo del Zulia; ahora te toca a ti “el honor”.
¡Debes sembrar una matica de mango
en el fondo de tu casa, por sí las moscas, para la ocasión coger las
hojitas y te sirvan de remedio!
