Ante los eventos que se desarrollan en Siria y cuyo más reciente resultado es el derribamiento de un avión Ruso por parte de Turquía (OTAN) hecho que confirma lo ya denunciado ante el escenario internacional del apoyo que esta nación brinda a ISIS, se hace patente la advertencia del Papa Francisco en torno de que se está desarrollando una III Guerra Mundial por partes, queda claro que en el medio Oriente una vez más como a todo lo largo de la civilización humana se está jugando la supervivencia del sistema más destructor ideado a través de la historia, el capitalismo expoliador de la naturaleza y de los seres humanos.
La decadencia del modo capitalista de producción es tal que sus defensores en los grandes centros de poder mundial no perciben otra salida a esta crisis que la guerra, recordemos en tal sentido las ganancias obtenidas a raíz de las dos grandes guerras del siglo pasado en Europa y el mundo en general, a partir de las cuales el sistema emergió fortalecido luego de grandes crisis económicas y políticas.
Hoy día de nuevo está en juego la supremacía mundial, en vista de que el capitalismo se ha enseñoreado en el planeta como sistema dominante, las grandes potencias se pelean el control de las fuentes de riqueza a lo largo y ancho del planeta, la lucha por poseer el petróleo, el gas, el agua, los grandes pasos interoceánicos, las zonas de suelos fértiles para el cultivo, las fuentes de los llamados minerales estratégicos y pare de contar, nos lleva a una conflagración entre la alianza sionista-anglo norteamericana y Europea occidental contra el eje emergente constituido por Rusia-China-India y BRICS en general, es en ese sentido que la decisión de naciones como China, Rusia y probablemente India de desplazar al dólar estadounidense como moneda de cambio en el comercio internacional agudiza la crisis final del tío Sam cuya economía ya luce asfixiada por la emisión continua de una moneda , el dólar que a todas luces es cada vez más una moneda falsa en términos de economía real, Estados Unidos hoy no tiene capacidad de respaldar su unidad monetaria ante la debilidad de su economía, esto no deja otra salida para dirimir la crisis que la opción de los misiles, amén de los señalamientos que se vienen haciendo desde hace algunos años por parte de destacados personeros representantes de los grandes centros del capital internacional acerca de que el crecimiento sostenido de la población mundial es una amenaza y de que el número de habitantes del planeta debería reducirse entre 500 millones (los más extremistas como Ted Turner fundador de CNN) Hasta 2000 millones los más light (como Christine Lagard, secretaria General del FMI),recordemos que la población mundial se aproxima a los 7000 millones de habitantes por lo que estamos hablando del exterminio de un 70% de la población mundial.
El capitalismo creció sobre una premisa falsa, la infinitud de los recursos, hoy día en un mundo superpoblado y con aberrantes diferencias sociales se pone en evidencia la inconsistencia de esa premisa, ante ello la solución que encuentran los expertos es una drástica disminución de la demanda por vía de la liquidación de gran parte de la población del planeta y el apoderamiento por algunos pocos de las fuentes fundamentales de recursos que aún posee la tierra.
Es en este contexto que Venezuela país que también posee una ubicación privilegiada y significativos yacimientos no solo de petróleo y gas, sino también de agua, biodiversidad y minerales estratégicos deberá hacer un inmenso esfuerzo por garantizar la paz, los demonios hambrientos del gran capital se han desatado, Venezuela es una presa atractiva para esa bestia, estamos obligados todos los venezolanos y venezolanas, indiferentemente de su posición política a preservar las paz, a zanjar nuestras diferencias en el marco del juego democrático, a desplegar la política con P mayúscula, es decir estamos obligados a ser fervientes y devotos militantes de la paz, está en juego la existencia misma de nuestra nación……Es necesario que la paz tome por asalto a la guerra.