Oficialismo contra Chavismo

OFICIALISMO CONTRA CHAVISMO

En los últimos meses hemos venido observando que todos los voceros de la oposición y la mayoría de los periodistas y locutores en sus distintos medios de comunicación utilizan la expresión “OFICIALISTA “aludiendo a los miembros CHAVISTAS que pertenecen al gobierno revolucionario.

Lo primero que debemos acotar es que la expresión “oficialismo” conforme al diccionario de la real academia española significa “ conjunto de hombres de un gobierno”, mientras que el concepto de “chavista” refiere a un grupo de personas , hombres y mujeres que siguen y practican las ideas de HUGO CHAVEZ FRIAS, vale decir, es un modo de vida, de hacer política, sea partidista o de gobierno. con todo respeto a quienes de forma incauta llaman a los chavistas; oficialistas, mas no a a quienes lo hacen con la pretensión de aniquilar una forma de vida y en consecuencia de actitud y aptitud.

Nosotros quienes residenciamos en Valencia y somos opuestos al gobierno que conforma y representa a la mesa de la unidad en el municipio nos preguntamos como podrían ser conceptualizados estas personas que gobiernan o apoyan al gobierno del alcalde del municipio Valencia, o a la alcaldesa del municipio Maracaibo o al que ostenta la gobernación del Estado miranda? Estas personas que los apoyan no serían en todo caso “ oficialistas”?.

Ahora bien; pretender acabar con las ideas de Chávez , con una forma de vivir sin que alguien haga objeción o lleve su voz de protesta frente a quienes de manera premeditada y malintencionadamente nos llaman oficialistas, por medio de esta vía nos permitimos aclararles que estos dos términos pese a ser manejados como sinónimo son diametralmente opuestos sin dejar por ello de hacer la crítica en el silencio afirmativo del chavista cuando es estigmatizado como oficialista.

Un oficialista es un defensor de puesto.

Un chavista es un defensor de ideas.

Un oficialista se dirige en forma singular

Un chavista se dirige en plural, como uno más del colectivo.

Un oficialista no hace críticas ni autocríticas, se conforma.

Un chavista es crítico, autocrítico y plantea propuestas.

Un oficialista es adulador

Un chavista es irreverente en el discurso pero leal en la acción.

Un oficialista es cauto.

Un chavista esta siempre dispuesto al diálogo y a la discusión.

Un oficialista es extremista, fanático

Un chavista es radical, es hombre de esencia.

Un oficialista es competitivo, individualista

Un chavista es solidario

Un oficialista considera que los partidos políticos son un mal necesario.

Un chavista cree en los partidos políticos porque considera que son una organización que genera disciplina y planificación para obtener el poder político.

Un oficialista utiliza a otros para llegar el poder.

Un chavista construye con los demás para obtener el poder.

Un oficialista cree fehacientemente en el burocratismo.

Un chavista cree en las masas, en el contacto con el pueblo.

Es así como estas y un sin fin de diferencias entre un término y otro nos permiten la propiedad de la palabra al asegurar que sin lugar a dudas estamos en presencia de una mala y ex profesa comparación que deviene indubitablemente de aquellos que pretenden con mala fe alcanzar un resultado distinto y generar una matriz ajena a la realidad chavista que impera en el país.




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