Cuando los Burócratas ¡escuchen!

rimero veamos cual es el significado de burócratas, porque lo que vemos a diario es que se hace referencia a los males del burocratismo, pero extrañamente quienes lo hacen son los propios burócratas tal como si no se tratara de ellos.

Al parecer la palabra proviene del francés; Bureau que significa oficina y cracia que significa gobierno, es decir que el significado de burocracia seria: gobierno de escritorio. Quienes conforman la burocracia son los funcionarios encargados de ejercerla, que de acuerdo a su definición son estos quienes nos gobiernan

Por la degradación del modelo político democrático implementado desde mediados del siglo XX, modelo que elige mediante el ejercicio del voto a los funcionarios; generalmente asimilamos la burocracia como algo maléfico, los sujetos que hacen carrera para ejercer la burocracia se les denomina políticos quienes igualmente gozan de muy poca credibilidad entre el pueblo y sus electores.

Para finales del siglo, ya agotado el modelo democrático como tal, surge una nueva propuesta, una nueva forma de gobernar, la propuesta del Comandante Hugo Chávez es rescatar la democracia, dándole un nuevo sentido y agregando en su ejercicio la participación protagónica y efectiva del poder popular representado en el pueblo mayoritario, independientemente de su contenido político e ideológico la propuesta del líder es inédita y única en el mundo, dando una nueva visión al concepto del socialismo que bajo el ideario y pensamientos de Bolívar, Rodríguez y Zamora buscan darle al pueblo la mayor suma de felicidad posible.

Ahora bien, nos preguntamos ¿Qué tanto hemos cambiado a los burócratas en ese empeño por cambiar el viejo modelo político económico? ¿Se podrá hacer el cambio revolucionario dejando intacto el sistema burocrático y sus funcionarios llenos de vicios del viejo modelo?, he ahí la gran diatriba que se nos presenta cuando hablamos de la contradictoria “revolución pacífica”, ¿existe?, ¿realmente existe?, por los resultados luego de 15 años de “revolución” creo que no.

Las diferencias entre los burócratas del viejo modelo y el nuevo revolucionario casi que no existen, por el contrario el rechazo a los nuevos se hace más evidente, dado que estos por temor a caer en los vicios del burocratismo se esconden, se blindan, sin embargo ya se habla que en la IV se robaba y se permitía robar y que ahora los nuevos burócratas revolucionarios roban para ellos solos y ya se les ha acuñado el término de boliburgueses, esta matriz de opinión le ha hecho mucho daño al proceso y no ha habido forma ni manera de contrarrestarla porque no hay un sistemas burocrático con funcionarios idóneos que gobiernen, su acuartelamiento no les permite que la sabiduría del pueblo llegue hasta ellos, no les permite combatir la impunidad porque en la mayoría de los casos los corruptos son quienes les rodean y asesoran, no les permite ver mas allá porque están secuestrados por los delincuentes, mafias organizadas y poderosos capitalistas con los que al final terminan siendo sus cómplices y protectores impidiéndoles ejercer con idoneidad su función de burócratas revolucionarios so pena de caer en desgracia denunciados por sus propios cómplices, caen en el chantaje y de esa fosa es casi que imposible salir.

Las leyes y la justicia pudieran en teoría responder a esta diatriba, es cierto, solo que la institución de justicia también forma parte del modelo y no está exenta del virus, sus funcionarios al igual que los burócratas gobernantes no han sido removidos sustancialmente del viejo modelo al nuevo, existe una solidaridad automática entre estos lo que hace que la diatriba sea mayor, sin control de los bienes del estado y su economía sin una justicia que actué y prevenga, con una burocracia escondida y mal asesorada difícilmente se puede avanzar en una revolución, para colmo ¡no escuchan!, desde los más altos niveles hasta los más pequeños, su principal objetivo es mantener su status sin entender que de esa manera más rápido lo pierden porque el pueblo percibe cuando un burócrata es eficiente y cuando no.

Cuando los burócratas escuchen se darán cuenta que allá afuera hay un mundo de ideas, de propuestas, muchas de esas parecerán locas pero no olvidemos que los grandes descubrimientos siempre nacen a partir de ideas locas, en lo personal he visto proyectos extraordinarios que dejan boquiabiertos a muchos pero que no han podido posicionarlos porque no hay nadie que los atienda, es el caso de este servidor que gracias a un tremendo descalabro como productor agrícola me dediqué en cuerpo y alma a investigar sobre el modelo de comercialización de los productos de los campesinos descubriendo ser uno de los más explotados del sistema capitalista lo cual es la principal causa del modelo rentístico que hoy día vivimos, dicha investigación dio como resultado proponer la implementación de una Ley para procurar hacer justicia y proteger al Campesino y a los productores agrícolas; gobernadores, alcaldes, funcionarios agrícolas, dirigentes campesinos, diputados, etc., maravillados con la literatura de la amplia investigación, ante las evidencias total y faclmente demostrables, con los considerandos, el articulado de la ley, piden que les envíe una copia por internet, seguramente intentan recorrer el camino que yo recorrí sin encontrar respuesta.

Le propongo a nuestros dirigentes y gobernantes a los más altos niveles colocar una receptoría de proyectos, pero que los revisen y evalúen ellos mismos en primera instancia, verán que se van a conseguir con gratas sorpresas, como por ejemplo que en la Asamblea Nacional no hay una Comisión, ni siquiera una Sub-comisión que legisle en torno al sector agrario campesino; que no es suficiente con solo desarrollar los cultivos agrícolas extensivos para ser una potencia agrícola, que es necesario desarrollar y proteger al sector campesino que es quien proporciona el 90% de los alimentos que consume nuestro pueblo.

Con la propuesta de ley aprobada y mediante un método inductivo intentamos entre otros regresar al campo a no menos de un millón de familias que pertenecen a este sector y que viven en las grandes ciudades en situaciones económicas y sociales dramáticas, lo cual permitiría trasladar la Gran Misión Vivienda Venezuela al sector rural como debió ser desde su inicio para procurarle al pueblo de menos recursos una vivienda digna pero con trabajo productivo.



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Gonzalo Ochoa Díaz


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