(Frente a la insidia de mentirosos)
El 11/02/2003, en el auditorio de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de LUZ, el Sociólogo Luis Pedro España y el Economista Gustavo García, de la UCAB y del IESA, respectivamente, dictaron, con el título de “La Pobreza en Venezuela”, sendas conferencias ante decenas de estudiantes y profesores. Sus aportes, manifestaron, eran producto de sus investigaciones.
Uno y otro expresaron, ante mi asombro y de varios de los presentes, que la escalada de la pobreza en Venezuela había sido tal, que saltó de un 23% en 1978, a 60.1% en 1998; remarcó que el año 2002 había "brincado" a 69.1%, una medición digna de todo elogio por la precisión de cifras jamás vista en las investigaciones venezolanas, que generalmente tardan meses y hasta más de un año en publicarse, y en el acto de esta presentación sólo habían transcurrido 40 días de haber culminado el 2002.
Cualesquiera de los lectores puede acudir a los Anuarios Estadísticos de la CEPAL, del INE, del BCV, del PNUD, y podrán constatar las cifras verdaderas, reales, que registran esos indicadores. ¿Qué no dirán ahora? ¿Creerán en los Índices de Gini, del desempleo, del hambre, de la pobreza extrema, del analfabetismo, del número de cursantes en la educación superior, de los invidentes que han recuperado la luz gracias a la Misión Milagro?
Por supuesto que acusarán de falseadores, de maquilladores de cifras a los miles de venezolanos que laboran en el Instituto Nacional de Estadísticas, INE, del Banco Central de Venezuela, de los ministerios y demás entes del Estado.
Con frecuencia leo los artículos de Luis Pedro España en El Mundo de la Economía y los Negocios y, por supuesto, también los de Gustavo García. Como sempiternos mentirosos, toman cifras al voleo y las vomitan en sus escritos, convirtiéndolas en mentiras que buscan engañar al lector desprevenido. Los verdaderos y genuinos investigadores no inventan, toman los datos, los procesan, los convierten en información para que ésta, utilizada por el interesado, se convierta en conocimiento. Las mentiras, más temprano que tarde, salen a flote en algún momento. Mi interés es el de todo investigador social, el de buscar la verdad en el área de las Ciencias Sociales donde quiera ésta se encuentre (también las mentiras). Es por ello que repito, para el lector serio, las cifras reales, visadas y revisadas una y otra vez por la CEPAL, publicadas aquéllos días en este mismo medio.
Los indicadores sociales, en los cuales Venezuela registra progresos históricos, marchan a la vanguardia en América Latina, región que marca hitos que son el comentario mundial. En algunos de esos indicadores nuestro país es el primero en la región, y en lo económico, a no dudarlo, se superarán en menos de dos años las dificultades que atravesamos. Esta coyuntura servirá para apuntalar medidas rezagadas en razón de la elevada renta petrolera, cuestión que está siendo interpretada conscientemente por el pueblo venezolano.
Veamos ahora la serie cronológica de la pobreza en Venezuela:
Cuadro Nº 1
Pobreza e indigencia en Venezuela
Años 1990-2012
(Porcentajes)
Años |
Pobreza |
Indigencia |
1990 |
39,8 |
14,4 |
1992 |
37,1 |
13,0 |
1994 |
48,7 |
19,2 |
1997 |
48,0 |
20,5 |
1998* |
42,0* |
10,8* |
2000 |
44,0 |
18,0 |
2004 |
45,4 |
19,0 |
2008 |
27,6 |
9,9 |
2010 |
27,8 |
10,7 |
2011* |
17,6* |
6,97* |
2012* |
21, 2* |
5,5* |
2013* |
|
5,5* |
Un estudio realizado por Riutort y Orlando (2001), bajo metodologías muy diferentes a las aplicadas actualmente por la CEPAL y el INE, y de allí la divergencia de los indicadores, muestra los siguientes datos:
Cuadro Nº 2
Pobreza total y crítica en Venezuela 1975-2000
Años |
1975 |
1980 |
1985 |
1990 |
1995 |
2000 |
Pobreza Total (%) |
26,1 |
24,3 |
42,3 |
68,9 |
66,7 |
58,8 |
Pobreza crítica (%) |
17,3 |
6,6 |
14,5 |
30,7 |
25,3 |
25,8 |
Fuente: Riutort y Orlando (2001).
Obsérvese la acusada variación sufrida por la pobreza durante las décadas de 1980 y 1990, cuando pasó de 24,3 en 1980, a 68,9 en 1990; 66,7 en 1995 y 58,8 en 2000. Y la pobreza crítica, que se ubicó en 6,6 en 1980, ascendió hasta 25,8 en el año 2000.
La comparación de ambos cuadros permite observar el gran salto cualitativo que ha vivido Venezuela durante los últimos 15 años, donde la pobreza cayó desde la ignominia de 68,9 en 1990, a tan sólo 21, 2 en 2012, demostración palpable de lo que ha significado la Revolución Bolivariana por la causa de los sectores secularmente excluidos de los beneficios de la renta petrolera.
En las cifras mostradas pueden encontrarse errores, sólo que no proceden de la inventiva irresponsable de quien esto escribe, sino de fuentes oficiales nacionales e internacionales, todas ellas sujetas a revisión constante por los organismos responsables.
[1] Miembro de Nº de la Academia de Ciencias Económicas del Estado Zulia.