Medios alternativos: Reflejo de la democratización de la comunicación

Credito: ABI

Caracas, 3 May. ABN (Rosa Raydan).- El incremento de los medios de comunicación alternativos son evidencia de la libertad de prensa que se disfruta en Venezuela durante los tiempos que corren.

Según datos del Ministerio del Poder Popular para Comunicación e Información (MCI), las cifras de la prensa escrita sobrepasan los 250 periódicos; y en lo referente a Internet, incluyendo periódicos digitales per se, weblogs y versiones digitales, se cuentan más de cien; sin embargo esta cifra varía casi a diario.

Según información del Consejo Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), actualmente existen 193 medios de comunicación alternativos en el campo radioeléctrico venezolano, traducidos en 167 emisoras radiales y 26 estaciones de televisión.

La expansión de los medios alternativos y comunitarios audiovisuales en Venezuela se dio hace siete años, luego de la promulgación de la Ley de Telecomunicaciones, en la cual se prevé su posibilidad de habilitación en el espectro radioeléctrico.

Más tarde, con la entrada en vigencia del reglamento de radiodifusión sonora y televisión abierta comunitaria de servicio público sin fines de lucro, la Ley de Responsabilidad en Radio y Televisión (Ley Resorte), los medios alternativos han logrado un mayor campo de acción.

En cuanto a su contenido, los medios de comunicación alternativos se han dado a la tarea de difundir la realidad de las comunidades venezolanas, sus noticias, expresiones culturales y tradiciones, aspectos que históricamente estuvieron excluidos del sistema comunicacional venezolano, y por lo tanto, desconocidos por el colectivo.

En esa medida garantizan la libertad de prensa ya que se convierten en un espacio propicio para la participación de diversos sectores y la publicación de informaciones, normalmente excluidas del aparato comunicacional tradicional que en muchas ocasiones acostumbra a invisibilizar a los pueblos.

«En la medida en que han crecido y se han expandido, el futuro de los medios alternativos es promisorio, como lo es el del país en general. Pienso que vivimos un proceso de cambios donde los medios comunitarios están a la vanguardia», opina el periodista Earle Herrera.

La historia

Los medios alternativos han estado presentes desde hace mucho en Venezuela, especialmente en la modalidad de prensa escrita. Uno de los pioneros en el país es el propio Correo del Orinoco, fundado por el Libertador Simón Bolívar para difundir las ideas revolucionarias. Este periódico aparece en 1818 en Angostura.

Bolívar fue víctima de manipulaciones mediáticas, y sobre ese respecto refirió: «El derecho de expresar sus pensamientos y opiniones de palabra, por escrito, o de cualquier otro modo, es el primero y más estimable bien del hombre en sociedad. La misma Ley jamás podrá prohibirlo, pero tendrá poder de señalar justos límites, haciendo responsables de sus impresos, palabras y escritos, a personas que abusaren de esta libertad, y dictando contra este abuso penas proporcionales».

Para Earle Herrera, la historia de los medios de comunicación alternativos y comunitarios es muy larga, pero antes de 1998 el Estado venezolano era indiferente ante este tipo de iniciativas.

En 1995 apareció en los kioskos el periódico ácrata El Libertario, el cual divulga la autogestión como forma de producción y las ideas como bandera de una sociedad libre del Estado y el mercado. Hoy en día continúa imprimiéndose a la par de una hoja en internet.

Sin embargo, la necesidad de la impresión de informaciones alternativas renace años después de forma masiva, «a partir del 98, frente a la gran ofensiva mediática contra el proceso de transformaciones que se dan en el país, los medios alternativos empiezan a desarrollarse. El 2002 fue el año de su bautizo de fuego», dijo Herrera.

Aseveró Herrera que durante el golpe de Estado de abril de 2002, «los medios comerciales se convierten en la vanguardia de la conspiración que buscó romper el hilo constitucional».

«Los medios alternativos, comunitarios e independientes jugaron un papel fundamental como mecanismo de comunicación e información de los sectores populares. Cuando los medios comerciales declararon un silencio informativo, pudimos calibrar la extraordinaria importancia de los alternativos, porque fue gracias a ellos que Venezuela supo lo que estaba ocurriendo», sentenció.

A juicio del periodista, los medios comunitarios y alternativos juegan hoy un papel fundamental en el país que se está construyendo. «Eso los convierte en baluarte de la democracia y de los cambios y la transformación que se está dando en Venezuela».

Herrera argumenta que en la Venezuela de hoy, «sin medios comunitarios no habría libertad de prensa. Es obvio que su presencia refleja la democratización de la comunicación en el país».

Un país de comunicadores

El sociólogo y director del periódico «Y ahora… noticias en paralelo», Miguel Ugas, sentenció que Venezuela, con la explosión de los medios alternativos, se aproxima a constituirse en un país de comunicadores, pero para ello hace falta activar mecanismos de educación, para lo cual el propone activar un sistema que ha denominado Misión Comunicación.

«Que haya ciento de medios comunitarios significa que son cientos de venezolanos los que participan de la comunicación alternativa, porque cada medio es activado por colectivos», comentó Ugas.

A su juicio, la sociedad venezolana está hoy a la vanguardia del proceso de comunicación alternativa a nivel mundial, ya que se ha ampliado la posibilidad de acceso a los medios de comunicación, «pero más que eso, debemos buscar la manera para la participación del pueblo en el quehacer comunicacional, que no se limite la relación a ser simple espectador, sino a ser actor del proceso», señaló.

«Para eso estamos proponiendo la Misión Comunicación, que tiene como propósito involucrar al pueblo en el quehacer comunicacional», apuntó.

Ugas resaltó que con la gran variedad de canales es posible que se materialice ese propósito, en especial con el nuevo escenario de los consejos comunales, que en la Ley de Consejos Comunales tienen consagrada la vía para la creación de los Comités de Medios de Comunicación e Información (artículo 9, ordinal 9).

También son propicios los escenarios estudiantiles, las fábricas, los parcelamientos campesinos, los núcleos endógenos, entre otros. «Así vamos hacia una efectiva socialización de la información», enfatizó.

«Creemos firmemente que en Venezuela hay un despertar en esta materia y se está impulsando una ruptura del nuevo modelo comunicacional. El nuevo modelo encaja perfectamente en la democratización de la información. Eso hay que profundizarlo y crear mayores canales expresivos para que el pueblo pueda participar. Este proceso de educación de la comunicación debe apuntar hacia la socialización de la comunicación», dijo.

En cuando a «Y ahora… noticias en paralelo», Ugas indicó que se trata de una especie de versión alternativa a los periódicos convencionales. «Creemos que estamos ejerciendo una comunicación libre y autónoma», resaltó.

«Se está gestando un nuevo modelo comunicacional en Venezuela, vigoroso e insurgente, que está reclamando espacio, y que en el proceso político del país ha jugado un papel importante. Cuando la confrontación se ha hecho más aguda, los medios alternativos han estado presentes», aseguró.

Una mirada innovadora

Para el miembro del colectivo que produce el mensuario En clave obrera, Juan Pablo Arteaga, los medios alternativos representan un punto de vista novedoso frente a las realidades mostradas por los medios tradicionales, lo cual, en consecuencia, potencia la libertad de prensa.

«Constituyen una dinámica innovadora frente a las alternativas que nos ofrece el pensamiento dominante. Se trata de que los oprimidos y explotados tengan sus propios medios de comunicación, muestren su visión del mundo y su la realidad con cabeza propia», declaró.

Arteaga señaló que los medios alternativos han contribuido con la libertad de prensa, no sólo en Venezuela, «sino en todos los procesos cuando los canales regulares de la televisión son altamente monopolizados y están al servicio de las grandes corporaciones o de los intereses de turno de los gobiernos. Allí los medios alternativos han prestado los canales necesarios para expresar ciertas cosas».

Colocó como ejemplo reciente la lucha de los trabajadores de Sanitarios Maracay, el cual, según aseguró, no fue cubierto lo suficiente por los medios venezolanos, tanto privados como públicos. «Fue gracias a los medios alternativos que pudo conocerse esa realidad».

«Así que hace falta potenciar este tipo de esfuerzos y ponerlo al servicio de las verdaderas luchas del pueblo. El socialismo no es una cosa estratosférica, como algunos pretenden hacerlo ver, sino por el contrario, es llevar hasta el final el proceso de lucha que se inició el 27 de febrero 1989», agregó.

En cuanto a su experiencia con En clave obrera, periódico que forma parte de la Asociación Nacional de Medios Libres y Alternativo (Anmcla), Arteaga, comentó que es un esfuerzo autofinanciado por los realizadores y los lectores, «independiente del Estado y la empresa privada».

En cuando a las impresiones de los lectores, Arteaga aseveró que han sido muy fructíferas, «sobre todo en los sectores de lucha, los campesinos y los trabajadores».


Esta nota ha sido leída aproximadamente 27998 veces.


La fuente original de este documento es:
Agencia Bolivariana de Noticias (ABN) (http://www.abn.info.ve)



Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Notas relacionadas