22 ene. 2017 - En su primera rueda de prensa en la Casa Blanca su nuevo portavoz oficial, Sean Spicer, condenó la difusión de material distorsionado sobre Donald Trump, sus palabras y acciones.
Ante todo, calificó de "irresponsable y temerario" el dato difundido por un periodista de la revista 'Time' sobre el desplazamiento del busto de Martin Luther King en la Casa Blanca. En realidad cambió de mesa dentro del Despacho Oval y no fue retirado de allí, como aseveraba una publicación: un error que el propio reportero admitió pidiendo disculpas.
Horas antes el presentador de la CNN, Jake Tapper, indicó en un tuit que durante su discurso en la sede de la CIA Trump "atacó" personalmente a un reportero que había interpretado mal los cambios hechos en el Despacho Oval, diciendo que el busto había sido reemplazado por otro, el del histórico primer ministro británico Winston Churchill.
Error numérico "vergonzoso"
En segundo lugar, Spicer censuró la manera de fotografiar la ceremonia de investidura así que la imagen intentara "minimizar el enorme respaldo" que le prestó la muchedumbre congregada en la Explanada Nacional. Un fruto de este enfoque tergiversado estaba entre las primeras fotos desde el Capitolio publicadas en Twitter. "Cifras imprecisas sobre lo grande que era la muchedumbre también fueron tuiteadas", agregó el portavoz.
"Fue el público más grande que jamás haya asistido a una inauguración", insistió. Aunque los servicios federales de EE.UU. no tienen el derecho a computar a las personas congregadas en los eventos públicos, Spicer ha ofrecido su estimación numérica. Estaban completamente repletas tres cuadras en las que caben 250.000 personas, 220.000 y 250.000 respectivamente. La totalidad de quienes asistieron a la investidura llegaría, al sumarse estos índices, a 720.000.
"Esos intentos de disminuir el entusiasmo de la inauguración son vergonzosos y equivocados", resumió el responsable, cuyas palabras recoge la revista digital 'The Blaze'.
La prensa que divide a EE.UU.
Spicer recordó que durante la campaña electoral y los meses posteriores muchos medios proponían responsabilizar a Donald Trump por algunos de sus juicios o aserciones. "Es un camino de doble sentido", advirtió. "Nosotros asimismo vamos hacer a la prensa responsable".
El portavoz explicó los motivos por los cuales el nuevo presidente quiere que la prensa sea franca en su representación de los hechos. Confirmó que Trump está comprometido con la idea de unificar Estados Unidos, mientras que los medios de comunicación están dividiendo a la sociedad con su comportamiento "deshonesto".
"El pueblo estadounidense se merece algo mejor y mientras él sea el mensajero de este increíble movimiento [que lo ha ascendido a la Presidencia], llevará su mensaje directamente al pueblo estadounidense, en lo que siempre estará su enfoque", prometió.
