Hablando claro

La sinvergüenzura de CNN

El periodismo es una profesión digna a la que he admirado desde el día en que puse un pie en las instalaciones de un medio de comunicación hace un bojote de años. Me he sentido orgulloso de tantos años compartiendo con profesionales de la comunicación social, unos graduados otros no, sin yo haber estudiado nada. Eran otros tiempos. No es que eran distintos a los profesionales de ahora; eran igualito de manipulables pero eran caimanes de un mismo pozo; pero el como el caso de CNN se acabó el carburo.

En tiempos del inglés no se notaba tanto pero cuando fundaron CNN en español por allá por los 90 y pico comenzó un cambio total en el periodismo y las grandes empresas que los manipulan y más aún cuando salió a la palestra la figura del comandante Hugo Chávez, quien sufrió los embates de la peor canallada periodística de personaje alguno en la historia de la humanidad.

Lo de la empresa y sus empresarios no los critico porque son los amos del dinero, pero lo que sí critico es la forma cómo profesionales de la comunicación llegan a ser tan manipulables por quienes tienen el poder del dinero y no les importa que mañana le dé una patada por el trasero y los mande al diablo. Una línea editorial que, la costumbre ha sido, desmoralizar, vilipendiar, humillar,descalificar, satanizar, montajes noticiosos, mentiras,etc., que a la postre ha sido una vergüenza mediática tanto para la empresa como para quienes se entregan y se arrodillan como profesionales ante los poderosos.

La sinvergüenzura se endureció desde el 11 de septiembre con el caso de las torre gemelas. Un caso que no me convencido ni me convencerá nunca por la forma como se derrumbó, y de cómo los medios pudieron transmitir en vivo el supuesto acto terrorista y el choque de aviones contra esos edificios. Quien haya pasado un día en un medio de comunicación sabe que eso es como un imposible, pero sucedió.

Allí comenzaron los grandes medios como CNN a "montar" noticias, trabajos engañadores, etc., así más o menos como el vulgar "montaje" de Venevisión el 11 de abril en Venezuela. Los grandes medios comenzaron el paseo por Irak donde masacraron un pueblo sin dolor alguno. Luego se fueron a Libia con otro invento donde mataron niños, ancianos, jóvenes, y ahí están los resultados. Hoy están tratando de engañar en Siria, donde para los grandes medios imperiales los terroristas son oposición moderada, sangre derramada todos los días y EE.UU. con el pico cerrado porque allí tienen las manos metidas pero los medios callan.

El plan mediático encabezado por CNN se ha expandido y se enrumbo hacia estos lados. Allí tienen el caso de Paraguay, Honduras, y el último caso el de Brasil, "dictaduras" donde el periodismo ha perdido la esencia. Todos contra Bolivia, Ecuador, Nicaragua, y ni se diga de Venezuela. Ha sido tanto el descaro de CNN que un imbécil "graduado" de periodista hizo montaje con un niño haciéndolo pasar como hijo de Evo Morales. Hasta allí el caradurismo y el descaro de medios como CNN y sus lacayos comunicaciones sociales rastreros como Patricia Yaniot y Fernando del Rincón como casos emblemáticos.

La sinvergüenzura y falta de respeto al público debería tener su castigo o no lo tiene. La actitud de los grandes medios como CNN es un descaro, un caradurismo, una desfachatez; no les importa la insolencia descarada.

Y no agarran escarmiento. Lo que pasó con el comandante Chávez que nunca pudieron con él, medios como The New York Times, The Wall Street Journal, que apostaron todo a Hillary Clinton y no daban un centavo por Donald Trump, porque era loco como Chávez, cuando no hallaron como decir que Hillary ganaría, ahora califican la presidencia de Trump como una revuelta impensable.

CNN por poco apostó sus periodistas a que ganaba Clinton demostrando el desprecio por Donald Trump, el nuevo Chávez mediático. La cara de decepción de los periodistas era un poema desagradable. Una cara de angustia. Un caso como para dejar de "fabricar" noticias falsas y falsas expectativas. Un caso como para que CNN deje para siempre de querer ser fabricante de presidentes y de "matar" candidatos como quisieron "matar" a Chávez y a Donald Trump.



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