Ante el sistema dominante de alienación, asesinato y hurto de conciencias que ha desarrollado el imperialismo de manera industrial es necesario atacar igual, desarrollar progresivamente la industrialización de la ideología socialista y bolivariana, direccionando esfuerzos en obtener una nueva conciencia social determinante en el alcance de nuestros objetivos históricos enmarcados en el II Plan Socialista de la Nación.
Generar estrategias basadas en el estudio del comportamiento social de nuestro pueblo así como las raíces culturales más profundas, la historia, costumbres y todos los elementos de identidad que sirvan como principios fundamentales para el desarrollo integral del Socialismo a través de la cotidianidad del pueblo: Conquista de audiencias.
Desarrollar novedosos medios y fuerzas productivas ideológicas, nuevos aparatos comunicacionales, informativos, de entretenimiento, motivación y desarrollo espiritual, generador de ideas y conciencia crítica, de participación popular en favor del fomento y consolidación del espíritu comunal, y de las Comunas en sí.
Reforzar los medios alternativos y comunitarios, hacerlos más visibles, escuchables, leíbles, expansivos y asequibles; Hay que seguir tejiendo una red de medios populares que ante la arremetida burguesa e incluso, ante un posible sabotaje al Sistema Nacional de Medios Públicos, sean los defensores y difusores de la verdad más inmediatos que tenga la Revolución.
Ahondar en la formación socialista y antimperialista del pueblo, consolidar un pueblo comunicador, intelectual y analítico, generador de opinión pública; Un pueblo praxis formado en la teoría y práctica revolucionaria; un pueblo historia que posea memoria, referencia patria, que conozca y reconozca los hechos pasados y presentes; estos tres elementos son pertinentes para el desarrollo del PODER POPULAR y arribo seguro al punto del NO RETORNO.
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