22 de agosto de 2016.- Los niños fueron las principales víctimas mortales que ocasionó el atentado del Estado Islámico en una boda kurda, en la ciudad de Gaziantep, sureste de Turquía, en el que murieron 54 personas.
De las 69 personas ingresadas en los hospitales como consecuencia del sangriento crimen del pasado sábado, 17 de ellas son reportadas de graves y cinco con riesgo para la vida, por lo que el número de fallecidos puede aumentar en las proximas horas.
Una nota de la agencia EFE señala que el análisis de las cámaras de seguridad en la calle donde se produjo el atentado demuestra que el atacante suicida era un adolescente de entre 12 y 14 años, y antes de la detonación dos personas que lo acompañaban se alejaron rápidamente del lugar.
El explosivo utilizado en el crimen estaba rodeado de trozos de metal para causar mayores daños, y las autoridades turcas indican que la pista principal conduce al Estado Islámico como autor del hecho.
Los novios, que sobrevivieron al atentado, son miembros del partido de la izquierda prokurda HDP, que siempre ha sido blanco de los atentados del Estado Islámico en Turquía.