10/02/13.-El jefe de la delegación del Gobierno colombiano en los Diálogos de Paz, Humberto de la Calle, enfatizó este domingo que el Ejecutivo no abrirá la agenda de conversaciones a temas nuevos planteados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) desde su plataforma política.

"Es importante recordar que las FARC han hecho pública varias propuestas y al respecto quiero decir que una cosa es lo que dicen las FARC en público como parte de su plataforma y otra es lo que hablan en la mesa", manifestó De la Calle en rueda de prensa desde La Habana, Cuba.

"Nos acogemos a la agenda pactada y no vamos a abrir la agenda de conversaciones a temas nuevos planteados por las FARC desde su plataforma política", sentenció.

El tema minero energético "o la idea de frenar proyectos para la generación de energía no forman parte de la mesa de conversaciones", agregó.

"No vamos a desviarnos de la agenda acordada y esperamos que las FARC cumplan lo pactado en el acuerdo general, aclaró.

De la Calle aseguró que "hay una posibilidad de paz que estamos construyendo a través de una agenda ordenada y seria que deja a salvo el cumplimiento de los deberes del Estado (...) El Gobierno tiene la obligación moral de buscar un entendimiento si la guerrilla tiene la determinación de poner fin al conflicto armado" que vive Colombia desde hace casi 50 años.

El Gobierno de Juan Manuel Santos "no ha dejado de cumplir con su deber en materia de seguridad y de orden público. Sabemos los desafíos a los que nos enfrentamos por estar dialogando en medio del conflicto, pero aquí estamos confiados de no desviarnos", indicó.

Los seis puntos de la agenda de negociaciones de paz entre las partes "se pondrán en marchar cuando las FARC hayan dejado las armas y se integren a la vida civil (...) En ese momento comienza la construcción del proceso" de paz, enfatizó el delegado colombiano.

Ritmo a mejorado

Las conversaciones de paz, que culminaron este domingo y que se retomarán el 18 de febrero próximo, tienen "un ritmo que ha mejorado, pero esto hay que mantenerlo y preservarlo", afirmó De la Calle.

Las negociaciones "pueden avanzar a buen ritmo para ponerle fin y determinación al conflicto", añadió.

El pasado 19 de noviembre el Gobierno colombiano y las FARC establecieron una mesa de negociaciones para alcanzar el fin del conflicto armado con el tema de la política del desarrollo agrario integral entre las prioridades de discusión, para construir una “paz estable y duradera”.

Otros puntos de la agenda establecida incluyen temas como las garantías para la participación ciudadana, el fin del conflicto armado y la solución al problema de las drogas ilícitas.

A la espera de liberaciones

Humberto de la Calle dijo que Colombia espera que las FARC "pongan en libertad a los policías y militares" retenidos recientemente y "lo hagan en un procedimiento ágil".

Manifestó su rechazo "al secuestro, este acto atenta con el proceso de paz. Los secuestros a todos nos duele y de ahí la necesidad de avanzar con celeridad en estas negociaciones".

Por otro lado, recordó que otro punto central en las conversaciones de paz, además de desarrollo agrario integral, es el tema de las víctimas. "No concebimos un acuerdo sin que la guerrilla le ponga la cara a sus víctimas", dijo.

Por su parte, el vocero de las FARC, Ricardo Tellez, afirmó este domingo que la insurgencia esta lista y presta para emprender el proceso de liberación de los uniformados que fueron capturados el pasado 25 de enero.

Tellez resaltó que las FARC está en plena disposición de agilizar el proceso, “seguramente no va a demorar mucho, y depende más del gobierno que de las FARC”.

Agregó que resulta "una realidad de la guerra que en medio de la confrontación pueden caer guerrilleros presos, pero también policías y soldados".

"Nosotros no quisiéramos que esa situación se diera, pero son casos de guerra. Por eso hemos insistido en el cese el fuego en una tregua bilateral, para evitarnos estas confrontaciones", señaló, al recordar que el Gobierno se niega a ello.