Naciones Unidas, agosto 4 - El embajador de Siria ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Bashar Jaafari, denunció que él y su familia han recibido amenazas de muerte, de las cuales puso en conocimiento a las autoridades de Estados Unidos.
“He recibido varias amenazas de muerte contra mi y varios diplomáticos sirios desde sitios de Internet de Arabia Saudita, Qatar y Estados Unidos”, denunció Jaafari ante los 193 miembros de la Asamblea General antes de aprobarse una resolución crítica contra Damasco, impulsada por los países árabes.
“Medios saudíes y cataríes ya no se sienten satisfechos apuntando hacia mi país; ahora van a por mí y a por los miembros de mi familia de una manera inmoral, antiética y vergonzosa”, añadió el embajador, según la publicación de Prensa Latina.
La Asamblea General de la ONU aprobó este viernes una resolución de condena al gobierno de Siria, a pesar del rechazo de Rusia y China, miembros permanentes del Consejo de Seguridad.
Con 133 votos a favor, 12 en contra y 31 abstenciones, la Asamblea General de la ONU aprobó este viernes la resolución contra Siria presentada por un grupo de países árabes, encabezados por Arabia Saudita.
Rusia, China, Venezuela, Cuba, Bolivia, Irán, entre otros, votaron contra de la medida, durante la Asamblea celebrada en la sede del organismo mundial, en Nueva York, Estado Unidos.
Los representantes de estos países criticaron que esta resolución considera al gobierno de Al Assad como único responsable del conflicto interno en Siria y deja a un lado los actos terroristas perpetrados por los mercenarios nacionales y extranjeros apoyados desde el exterior contra el pueblo de ese país.
Voceros del presidente al Assad dieron a conocer que Estados Unidos está cooperando con Arabia Saudita y Qatar, países que han manifestado su interés en ayudar a los insurgentes sirios para desestabilizar al Gobierno de Bashar Al Assad.
Este miércoles se conoció que el presidente de EE.UU, Barack Obama, firmó meses atrás una orden secreta que autoriza operaciones encubiertas de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por su sigla en inglés) para apoyar a los grupos armados que operan en Siria.