5 Marzo 2012 - En la alcaldía del distrito XIV de esta ciudad fue estrenado el documental “Haití, el llamado del caracol reina”, que aborda la colaboración médica cubana tras el terremoto y la epidemia de cólera en ese país caribeño.
La cinta, de la realizadora belga Anne Delstanche, muestra el trabajo de los especialistas de la mayor de las Antillas, quienes fueron los primeros en atender a las víctimas cuando un sismo destruyó la capital y otras ciudades de esa nación en 2010.
“Los cubanos han construido un sitio en el corazón de la gente por su manera de trabajar y estar siempre al lado de ellos, con un gran respeto por su cultura y su manera de ser”, dijo Delstanche en entrevista a Prensa Latina.
Antes de la tragedia, cuando nadie miraba hacia ese país, ya los médicos y maestros de Cuba estaban allí para dar su apoyo en el combate a las secuelas de la pobreza, la explotación y el abandono, explicó la cineasta.
El terremoto estremeció a la comunidad internacional -explicó- pero mucha de la colaboración exterior llegó y laboró al margen del gobierno y, a veces, hasta en contra de sus orientaciones.
“Los haitianos son muy sensibles a las muestras de respeto hacia ellos”, señaló, y por eso valoran tanto la actitud de los médicos y especialistas de Cuba.
En el documental, intelectuales y funcionarios ofrecen su testimonio al respecto y contrastan esta conducta con la de otros países, de donde lo primero que arribó fueron militares armados con el pretexto de garantizar la seguridad.
Sobre la presentación de su obra dos años después de estos acontecimientos, Delstanche explicó que lamentablemente cuando Haití dejó de ser noticia, desapareció de las pantallas de los televisores y las páginas de los periódicos europeos.
“Aquí los medios muestran imágenes impresionantes para atraer a la audiencia, pero después todo se olvida, no hay un seguimiento ni dan la oportunidad a la gente de entender lo que verdaderamente está ocurriendo allá”, indicó.
Por esa razón vino la idea de presentar este documental donde se le da la palabra al pueblo haitiano y se invita a reflexionar sobre una forma de cooperación solidaria y comprometida, como la cubana y otros países del Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA).
“El documental está en Internet y se puede bajar de manera gratuita porque el objetivo es alcanzar la mayor difusión”, dijo la cineasta e informó que tras su exhibición aquí en el acto de solidaridad con los pueblos, esta semana hay dos presentaciones más, una en el norte de Francia y la otra en Bruselas. Respecto al título, Anne Delstanche recordó que el caracol era utilizado para convocar a la población haitiana ante grandes acontecimientos, como la revolución de los esclavos que condujo a la independencia en 1804.
“Hoy, el caracol debe volver a llamar para transformar la realidad de ese pueblo”, sentenció.
