"Un error de buena fe": Colombia admite que sobrevoló zona de entrega de retenidos por las FARC que pusieron en peligro la liberación

Juan Manuel Santos, Ministro de Defensa de Colombia

Juan Manuel Santos, Ministro de Defensa de Colombia

07 de febrero 2009. - El ministerio de Defensa de Colombia admitió este viernes en un comunicado la realización de sobrevuelos de la Fuerza Aérea, el pasado domingo, sobre la zona en la que serían liberados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) seis uniformados, con lo que se confirma la denuncia hecha a través de TeleSUR por el periodista colombiano Jorge Enrique Botero.

El texto explica que el general Freddy Padilla, Comandante de las Fuerzas Militares, "decidió que por razones de seguridad para la operación de liberación y para controlar pistas clandestinas, era necesario realizar sobrevuelos de control por encima de 20 mil pies", a pesar de que Bogotá se había comprometido a suprimir toda actividad militar en la zona.

De hecho, el lunes pasado, Santos había dicho que los sobrevuelos habían sido acordados con el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).

Al respecto fuentes humanitarias advirtieron este viernes que en la reunión entre el jefe de la delegación del CICR, Cristophe Beney, el ministro Santos y la cúpula militar, se aclaró que sólo podrían sobrevolar aviones comerciales a gran altura.

Cuando se detectó el problema, uno de los delegados que se encontraba en el lugar llamó al jefe del CICR en Bogotá, quien a su vez se comunicó con el ministro de Defensa, y sólo después de esas gestiones detuvieron los vuelos.

Pero la polémica recobró fuerza este miércoles cuando el periodista Daniel Samper desmintió públicamente al ministro Santos.

Samper, quien junto a Botero formó parte de la comisión que acudió a recibir a los liberados, aseguró que los integrantes del grupo, incluidos los representantes del CICR, nunca fueron informados de que el gobierno haría esos vuelos el pasado domingo.

"Si hubiéramos sabido que el gobierno quería poner vuelos, a cualquier altura, nos habríamos negado, porque habría pasado lo que ocurrió, y hubiéramos quedado nosotros como cómplices de esto que los guerrilleros entendieron como una trampa", afirmó.

Pese a que Botero aseguró que tenía pruebas fílmicas de los hechos, el presidente Álvaro Uribe, lo calificó el martes pasado a él y a Samper como "publicistas del terrorismo".


Esta nota ha sido leída aproximadamente 4265 veces.



Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Notas relacionadas