Bogotá, 23 Mar. ABN.- Con un corto comunicado el gobierno colombiano señaló que acatan las decisiones tomadas en el seno de la Organización de Estados Americanos (OEA) con respecto a la condena de la comunidad internacional a la masacre perpetuada por el ejercito neogranadino en territorio ecuatoriano y además reiteró su posición de que el sitio donde fue efectuada la masacre era escondite de terroristas, refiriéndose a que todos los que perecieron en la masacre eran “terroristas”.
'El Gobierno colombiano se permite expresar su acatamiento total a las decisiones de la Organización de Estados Americanos (OEA) y recuerda al mundo que el campamento de alias 'Raúl Reyes' era un sitio de terroristas que actuaban contra el derecho a la seguridad del pueblo colombiano', señaló el comunicado.
Esta respuesta del gobierno colombiano se da una vez que se abrió el debate sobre la identidad de uno de los rebeldes fallecidos, ya que declaraciones de una familia ecuatoriana afirman que en realidad el cadáver de “Julián Conrado” es el de su hijo Franklin Aisalia.
Para Guillermo Asalia no hay dudas de que su hijo murió en el bombardeo al campamento clandestino de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en Sucumbíos, Ecuador.
Según su padre, él tenía 38 años y era cerrajero. Trabajaba en un taller de metalmecánica del norte de Quito. No estaba casado y el dinero que ganaba servía para ayudar en la manutención de la casa.
Luego de que se conoció la noticia del ataque a la base de la guerrilla colombiana, la familia observó la foto difundida en Colombia de los cadáveres de ‘Reyes’ y de ‘Conrado’. Ese momento, el parecido físico, especialmente el bigote, le llamó la atención y pensó que ese cuerpo era de su hijo, informó el diario El Comercio, de Ecuador.
El pasado sábado, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Ecuador emitió un comunicado sobre el grave caso. En el documento se señala que la canciller María Isabel Salvador “ha instruido al Consulado General del Ecuador en Bogotá para que tome contacto con las autoridades competentes, a fin de determinar con absoluta precisión la identidad de dicha persona y de este modo confirmar o descartar la presunción de los familiares de Aisalia”.
En referencia a esto, el presidente de Ecuador, Rafael Corrrea, aseguró que “eso sería extremadamente grave, sumamente grave, el problema con Colombia se extendería porque entonces se trataría del asesinato de un ecuatoriano en suelo del Ecuador por fuerzas extranjeras”.
En un comunicado público, emitido el pasado viernes, Juan de Dios Parra, secretario de la Asociación Latinoamericana para los Derechos Humanos (Aldhu), con sede en Quito, hizo público informes de la Interpol en la que aseguran que el Ejército de Colombia asesinó al cerrajero ecuatoriano Franklin Aisalia Molina para suplantar su identidad, con la del guerrillero, Julián Conrado.
