GAZA 1 de Mar de 2008. . El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abas, decidió
suspender las negociaciones de paz con Israel tras la muerte el sábado
de al menos 61 palestinos en una serie de ataques israelíes en la
franja de Gaza, una de las más sangrientas de los últimos ocho años. En
Nueva York, el Consejo de Seguridad de la ONU anunció que mantendrá una
reunión a partir de las 19H00 locales del sábado (00H00 GMT del
domingo) para abordar la crisis.
El presidente Abas "decidió suspender las negociaciones en señal de
protesta contra la agresión israelí", declararon a la AFP fuentes de su
oficina. Por consiguiente, Abas anuló una reunión prevista en los
próximos días con el primer ministro israelí, Ehud Olmert, así como los
encuentros programados entre las delegaciones negociadoras de un
acuerdo de paz, según las fuentes.
Un total de 61 palestinos perecieron en la operación israelí del
sábado en la franja de Gaza, una de las más mortíferas desde el
estallido de la segunda Intifada en septiembre de 2000, según el último
recuento facilitado por fuentes médicas.
Saldo de fallecidos
Desde el inicio el miércoles de esta ofensiva que pretende poner
fin a los disparos de cohetes contra territorio hebreo, han perdido la
vida unos 90 palestinos. Un civil israelí falleció el miércoles debido
a uno de esos proyectiles.
En el norte de la franja de Gaza, el sábado perdieron la vida 54
palestinos, entre ellos activistas pero también mujeres y niños,
mientras que otras 150 personas resultaron heridas. Dos palestinos
murieron en un ataque aéreo contra un puesto de policía en Jan Yunes,
en el sur de la franja, mientras que cinco miembros de la policía del
movimiento islamista Hamas fallecieron en otra ofensiva por aire en el
sector de Rafah (sur).
El ejército israelí anunció por su parte la muerte de dos de sus
soldados mientras que otros seis resultaron heridos. Estas últimas
muertes elevan a 6.257 el número de personas fallecidas en el conflicto
israelo-palestino desde 2000, en su gran mayoría palestinos, según un
recuento de la AFP.
Los grupos armados palestinos, por su parte, dispararon más de 50
cohetes contra Israel, donde hirieron a siete personas, entre ellas dos
niños y una mujer, en la localidad sureña de Ashkelon, a unos 10 km de
la franja de Gaza, según el ejército.
Conversaciones de paz "enterradas bajo los escombros"
Saeb Erekat, uno de los principales negociadores palestinos en el
proceso de paz con Israel, declaró a la AFP que las conversaciones con
Tel Aviv "están enterradas bajo los escombros de las casas destruidas
en Gaza". "El proceso de paz ha sido arruinado por las agresiones
israelíes", afirmó Erekat.
Las conversaciones entre ambos pueblos tenían el objetivo de
alcanzar un acuerdo de paz en Oriente Medio antes de fines de año, tal
y como habían acordado Abas y Olmert el pasado noviembre en la
conferencia internacional de Annapolis (Estados Unidos).
Abas consideró el sábado que la ofensiva israelí era "más que un
holocausto", y volvió a pedir "protección internacional". "Es
impensable que la reacción israelí a los disparos de cohetes
palestinos, que nosotros condenamos, sea tan terrible y espantosa",
afirmó.
Operaciones israelíes continuarán
Según la televisión pública israelí, un regimiento entero, es
decir, unos 2.000 soldados, participaban el sábado en las operaciones
de la franja de Gaza. Por el momento, Israel no tiene intención de
poner fin a su ofensiva: "No se ha fijado un límite en el tiempo" ya
que "la operación durará tanto como sea necesario", declaró a la AFP
Ronen Moshe, portavoz del ministro de Defensa, Ehud Barak.
Fuentes militares hebreas señalaron además el sábado por la noche
que proseguían los violentos combates entre soldados y activistas en
Jabaliya, donde operan unidades de infantería y tanques israelíes
apoyados por helicópteros. "Vivimos en un ambiente de guerra total",
resumió Abu Alaa, de 40 años, vecino de Jabaliya.