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25 de Diciembre de 2007. - Clara González de Rojas, madre de la ex aspirante a la vicepresidencia Clara Rojas, afirmó hoy en Bogotá que "ya está a un paso" la liberación de su hija, de su nieto Emmanuel y de la ex congresista Consuelo González de Perdomo, del grupo de 45 secuestrados con fines de canje por las FARC.
"Ojalá sea mañana mismo", dijo Clara González tras conocer que el presidente venezolano, Hugo Chávez, comparecerá este miércoles ante la prensa en Caracas para informar del proceso para la puesta en libertad del niño y las dos rehenes.
La madre de Clara Rojas agregó que ella no tiene conocimiento del avance de estas gestiones humanitarias, pero indicó: "El procedimiento (para la liberación) lo conoceremos mañana (miércoles)".
No obstante, Clara González sostuvo que está segura de que el niño y las dos cautivas serán puestas en libertad en breve.
"No sé en cuánto tiempo, en cuántas horas, en cuántos minutos será una realidad la liberación de mi hija, del niño y de Consuelo", añadió, pero enfatizó que "ya está a un paso".
La entrega de Emmanuel, de Clara Rojas y de Consuelo González fue anunciada por el Secretariado (mando central) de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en un comunicado fechado el 9 de diciembre pasado y conocido hace una semana en Bogotá.
En la nota, los rebeldes explicaron su decisión como desagravio a Chávez y a la senadora colombiana Piedad Córdoba, quienes ejercieron hasta hace un mes como "facilitadores" de un acuerdo humanitario sobre secuestrados por la guerrilla de las FARC.
Después de tres meses las tareas de ambos fueron canceladas por orden del gobernante colombiano, Álvaro Uribe, lo que llevó a Chávez a dejar en suspenso las relaciones bilaterales.
Clara Rojas está en manos de los rebeldes desde el 23 de febrero de 2002, cuando fue secuestrada junto a la ex candidata presidencial Íngrid Betancourt, de quien era compañera de fórmula electoral, como aspirante a vicepresidente.
Al año siguiente Clara Rojas dio a luz a Emmanuel, cuyo padre es un guerrillero.
La otra rehén incluida entre la anunciada liberación, Clara González de Perdomo, está cautiva desde el 10 de septiembre de 2001 y su liberación había dependido hasta ahora de la negociación de un acuerdo humanitario de canje de 45 secuestrados por medio millar de rebeldes presos, incluidos dos extraditados a Estados Unidos.
