Predominante inhumano pavor y no por mera casualidad, un Estado-Nación se edifica sobre la insólita base del encubierto delito gobernante. Estado constituido bajo la plataforma de todo contexto de "legitima" ilegalidad, de un Para-Estado fructificando el asedio, violencia brutal, crímenes en serie, de su patrocinio y conformación al Estado-Para-Castrense, de Para-Fuerzas criminales y hamponiles luego no controlables, de indignante perplejidad en su praxis entrampada del mismo pasmo y lo inaudito a su triquiñuela diplomática, certificada ésta por el absolutismo imperial que direcciona y obstruye cualquier mínimo signo de prudente decencia política, de régimen con notorio terrorismo de Estado contra su propia ciudadanía, delito que signa como gala exportada y daño a hermanas naciones vecinas y de indiscutible única patente de corso gringa; la cual, establece Para-Leyes amparadas y amañadas de clara inconstitucionalidad nacional e internacional. Desfigurante, es brazo ejecutor y ocupante cisma destructor regional del resto de nuestras naciones hermanas incursas en sostener su epónima soberanía aun divergiendo de factores ideológicos, mas, sí, todas prestas a innovar, ensayar, errar y corregir sobre la marcha, nuevas organizaciones Indo-Afro-Americanas liberadoras del norte impositivo colonialismo, a re-independizar, a la necesaria unión agrupante para construir la fuerza de nuestra defensa estabilizadora, a evitar se implante el guerrerismo fratricida solidificado por: La OEA-ONU-OTAN que tan solo ha dejado como resultado el incuantificable saldo negativo de: desolación, demolición, arrase, muerte, inhumanidad, una gran cuantía innecesaria que arroja el masacre de inocentes niños y niñas, hombres y mujeres, soldados momificados, religiones adeptas al poder compuestas de su inmoral ignominia, de estas organizaciones corroídas, cómplices de sus atroces delitos y por ende la hambruna, la total desgracia, el enriquecimiento de las grandes transnacionales de la "industria" armamentista y privar los derechos encabezados por el derecho de vivir. Debemos erradicar todo acoso acólito-imperial signado por la rancia oligarquía, por la delincuencia Drogo-Paramilitar representada por la Para-Presidencia. Exterminar a ese imperio agresor innecesario, que su letalidad no fragüe su propósito de retomar lo que peyorativamente y con soez grosería osó calificar de su patio trasero, que el felón no instigue más y que ningún hombre o mujer por muy hijo de esta Gran Patria fulmine el ideario bolivariano, que las ideas renacientes de la libertad universal reconstruidas por Hugo Chávez no vayan a parar al vacío histórico por la necedad del número 82 y un luso colonialista presidencial proclive a la contención del poder de su clase dominante. Que Mercosur, Unasur y Celac sean el urgente dispositivo para crear el neo-organismo que garantice nuestra defensa integral, sólo así, tendremos paz necesaria exportable al mundo, liberación humanística, salvación a la existencia y continuidad de toda especie.-
