La derecha española y el fascismo internacional son azotados por un miedo descomunal. Las recientes elecciones en España, demostraron que ni el Partido Popular ni el Partido Socialista Obrero Español poseen amplia mayoría para ejercer el gobierno municipal. Intentarán aliarse a otras fuerzas de derecha; pero no podrán ejercer un control hegemónico en el gobierno.
Muchas lecturas podemos realizar de los resultados de estos comicios electorales. En primer término, comienza a consolidarse una fuerza cercana a la izquierda surgida de las manifestaciones en contra de la crisis económica, el desempleo y los desahucios. Podemos emerge con el patrón de aglutinamiento de los ciudadanos que se sienten olvidados y muchas veces agredidos por el gobierno fascista. Visto desde la derecha, Podemos es un peligro para la estabilidad política del fascismo instalado en España.
En segundo lugar, el discurso mediático del PP y el PSOE está vencido. El apoyo que dieron a los bancos rescatándolos de la quiebra perjudicó la economía y por extensión a toda España. Así, desde estos bancos se desató una persecución inhumana y miserable que desalojó a miles de españoles de sus hogares dejándolos en la calle. Más que voto castigo es entonces la posibilidad de vislumbrar cambios profundos en el pensamiento europeo.
No extraña entonces la campaña en contra de Venezuela. Rajoy y sus huestes de filofascistas junto con los mercenarios de la política colombiana y los depredadores de Washington usan la mediática internacional para crear una matriz de opinión que involucra a Venezuela en narcotráfico. Irrespetando la soberanía y con la complicidad de la oposición venezolana, adelantan una campaña para acusar a personeros del gobierno de Maduro de traficantes. La intención la conocemos: provocar una salida de facto en nuestro país pero además, sembrar de miedo y zozobra a España al ligar directamente a Podemos al supuesto narcogobierno venezolano.
Están asustados y con razón. Por ese camino pierden poder y se abre la posibilidad de extirpar la monarquía caduca y farandulera de España.