Praga dorada fue liberada por los tanques soviéticos

Traducción desde el inglés por Sergio R. Anacona

Strategic Culture Foundation

http://www.strategic-culture.org

El acto de capitulación incondicional firmado el 9 de mayo de 1945 no puso fin a las hostilidades en Europa. El alto mando alemán ordenó a las fuerzas del noroeste de Alemania, Dinamarca y Holanda deponer las armas. No había razón alguna para continuar con la resistencia ahí. La lucha tendría que continuar en el este. El Grupo de Ejércitos del Centro (1ª División de Tanques y 17ª División de Ejército) dirigidas por el Mariscal de Campo Ferdinand Schörner y algunos elementos del Grupo Ostmark del Ejército alemán (operativo en Austria y Checoslovaquia) dirigidos por el General de primera antigüedad Lothar Rendulic se concentraron en Checoslovaquia con el objeto de presentar una rígida resistencia al Ejército Rojo. La fuerza alemana compuesta por 900 mil hombres, contaba con 9,7 mil piezas de artillería y morteros, 1,9 mil tanques y piezas de artillería auto-propulsadas, como también alrededor de mil aviones de combate.

El nuevo gobierno alemán del Gran Almirante Karl Dönitz, resistió el avance de las tropas soviéticas en la parte central y occidental de Checoslovaquia con el propósito de asegurar que las fuerzas alemanas se rindieran ante los británicos o los norteamericanos y no ante las tropas soviéticas.

Los aliados occidentales de Rusia jamás hicieron nada para cambiar esta situación con la esperanza de disminuir el éxito del Ejército Rojo y en consecuencia el alcance de la influencia soviética en Europa Central. El día 30 de abril de 1945 Winston Churchill escribió a Franklin Delano Roosevelt que la liberación de la parte occidental de Checoslovaquia podría cambiar el status de posguerra del país e influir en la situación de los países vecinos.

El Supremo Comandante Aliado, Dwight D. Eisenhower, envió una carta el día 4 de mayo al general de ejército Aleksei Antonov, Jefe del Estado Mayor Soviético, para informarle que él intentaría desplegar fuerzas hacia las riberas de los ríos Vltava y Elba (ribera izquierda de Praga). Antonov respondió que no estaba permitido desviarse de lo establecido por los protocolos de la Conferencia de Crimea, los cuales con claridad definían la línea donde las fuerzas soviéticas debían encontrarse con las fuerzas aliadas. Eisenhower entonces ordenó al General Omar Bradley, Comandante del Grupo 12º de Ejércitos detenerse en la línea de Karlovy Vary – Plzen – Ceske Budejovice. Inmediatamente luego de la Operación Berlín, el Mariscal de la Unión Soviética, Iván Konev, Comandante del 1er Frente, que soportó el mayor peso de la lucha en la Operación Praga, ordenó a sus fuerzas desplegadas en el flanco derecho, iniciar un rápido avance a lo largo de la ribera del río Elba para golpear la concentración de fuerzas enemigas en Dresden-Görlitz y tomar la ciudad de Praga en el sexto día desde el inicio de la ofensiva. Con un frente de 150 kilómetros de profundidad, el ritmo del avance fue de alrededor de 20-25 kilómetros por día.

El Alto Mando ordenó la ofensiva el día 7 de mayo de 1945. Justo antes que la operación fuera lanzada, las unidades de inteligencia del 1er Frente Ucraniano, informaron que el enemigo había comenzado a retirarse en algunos puntos. Las fuerzas soviéticas se apresuraron en persecución de los alemanes. El 4º Ejército de Tanques conducido por el General Lelushenko y el 13er Ejército dirigido por el general Pujov cubrieron 23 kilómetros durante el primer día y 45 kilómetros durante el segundo día, aproximándose a Erzgebirge en las Montañas Ore. Este súbito golpe y nuevos avances lograron cercar a 40 mil hombres del grupo de ejércitos cerca de Breslau.

El día 7 de mayo, el 2do Frente Ucraniano lanzó también una ofensiva. El 7mo Ejército de Guardias, conducido por el Teniente General Mijail Shumilov, abrió una brecha de 25 kilómetros en las defensas enemigas, avanzando 12 kilómetros por día. Entre el 6 y el 7 de mayo el 4º Frente Ucraniano bajo el mando del General de Ejército Andrey Yeryomenko se aproximó a Olomouc amenazando la retirada del 1er Ejército de Tanques del enemigo. No obstante, el día 8 de mayo el enemigo lanzó una ofensiva con el objeto de recapturar Praga.

La rápida ofensiva de las fuerzas soviéticas frustró los planes del alto mando alemán.

Posteriormente en el día 7 de mayo, el Mariscal de Campo Ferdinand Schörner ordenó retirarse hacia occidente y rendirse a los norteamericanos. El Alto Mando Soviético no podía permitirlo, especialmente en vista que la capitulación había sido firmada en Reims y los alemanes habían cesado las hostilidades en el Frente Occidental.

Las fuerzas soviéticas aceleraron el ritmo de su avance.

A finales del día, los elementos adelantados del 1er Frente Ucraniano cruzaron las Montañas Ore para marchar directamente hacia Praga donde el levantamiento ya se había iniciado.

El día 8 de mayo, el 5º Cuerpo Mecanizado bajo el mando del Mayor General Iván Ermakov, destruyó el cuartel general del Grupo de Ejércitos del Centro dejando a las fuerzas alemanas sin control. El día 9 de mayo, elementos del 4º Ejército de Tanques (62º y 63º de los ejércitos de tanques y la 70ª Brigada de Artillería auto-propulsada) avanzaron 90 kilómetros para entrar los primeros en la capital checoslovaca. Soldados armados con fusiles automáticos eran transportados en tanques. Luego de un tiempo, el 3er Ejército de Tanques del 1er Frente Ucraniano, seguido por elementos del 2do y 4to Frente Ucraniano entraron en Praga. Finalmente, ellos sofocaron la resistencia y liberaron completamente la capital de Checoslovaquia. Llegaron muy a tiempo para apoyar la insurgencia en la ciudad. Los soldados soviéticos salvaron de la destrucción a esta hermosa ciudad europea. Las desorganizadas fuerzas del enemigo compuestas por más de 50 divisiones fueron rodeadas al este de Praga. Perdieron el control y la capacidad de lucha. El día 10 de mayo, el 1er y 2do Frente Ucraniano tomaron prisioneros a 130 mil hombres y mucho armamento y equipos. El 4to Frente Ucraniano alcanzó un gran éxito.

Entre el 10 y el 11 de mayo, los tres Frentes Ucranianos continuaron desplazándose hacia occidente. El día 11 las fuerzas soviéticas de encontraron con el 3er Ejército de Estados Unidos en la línea Karlsbad – Plzen – Klatovy – Ceske Budejovice (Budweiss). La última ofensiva soviética en Europa había terminado. A diferencia de muchas capitales europeas, Praga abriga el recuerdo de sus libertadores. Sucede que Milos Zeman, Presidente de la República Checa, ignorando el perentorio alarido de Washington, visitó Moscú en celebración del 70 aniversario de la Gran Victoria.

Nota.- Sus comentarios y opiniones acerca de este artículo serán bienvenidos en

editorial@strategic-culture.org







 



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1100 veces.



Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter