Declaración / Balance de Marea Socialista Carabobo

La Revolución Bolivariana en la etapa post 6D

Los resultados electorales del 6D, lo que en realidad evidencian es la encrucijada histórica en la cual se encuentra el proceso Bolivariano iniciado en diciembre de 1998 con el triunfo electoral de Hugo Rafael Chávez Frías. Marea Socialista Carabobo expone acá ante la opinión pública, de manera sintética algunos puntos de interés para también tratar seguir animando el debate entre toda la militancia revolucionaria, socialista, bolivariana y chavista de nuestro país, el Continente y el resto del mundo de cara a estos resultados electorales del 6D. Lo que más nos anima es que se produzca lo que el pueblo chavista está pidiendo a gritos y en todas partes: lectura!, lectura!, lectura, de la situación.

1. La preocupante situación internacional

La crisis estructural del capitalismo actual está asociada a los límites del modelo de acumulación y explotación asumido en el siglo XXI. La transición al imperialismo global ha implicado el impulso desde distintos lugares del orbe, de un modelo autoritario de gobierno, de corte neofascista en el planeta. Eliminar buena parte de las conquistas sociales, políticas, culturales, económicas y humanas alcanzadas por los trabajadores en sus luchas del siglo XX le exige al capitalismo actual un estilo tecnológico-militar de gobierno que incluso, -no importa mucho-, que supere las concepciones liberales burguesas de la democracia como sistema político de gobierno. El fascismo nanotecnológico, cultural y militar del siglo XXI es un riesgo cierto en el mundo hoy. En ese sentido, la región de América Latina y el Caribe se constituye en una zona de disputa y control; por ello lo que está ocurriendo en la región, más allá de las degradaciones e involuciones de los llamados gobiernos progresistas, no puede ser despachado sólo con la clásica respuesta de interpretación de gobiernos pro burgueses sino que debe ser valorado en el marco de profundas contradicciones inter capitalistas y movimientos de deslinde con la lógica del capital como resultado de la presión de las masas.

2. El chavismo es una fuerza revolucionaria

El chavismo es una síntesis rebelde, colectiva, insumisa que parte de distintas prácticas de resistencias anticapitalistas para ir al encuentro del ideario socialista, perdido con la caída del muro de Berlín. El Chavismo es un modo de entender, interpretar la realidad y luchar que supera la figura de Chávez. En consecuencia el Chavismo nutre al pensamiento socialista de imaginarios, mecanismos de solidaridad, formas de construir ese otro mundo posible que constituyen parte de la identidad nuestroamericana. Ello implica un desafío para el marxismo revolucionario por cuanto le reta a construir significados, significantes y síntesis discursivas que potencien su vigencia contextual en el siglo XXI, en una región sometida a la colonización cultural de las naciones que históricamente le han dominado. Ser revolucionario socialista en la actualidad en América Latina y el Caribe implica reivindicar la imbricación anticapitalista del Chavismo socialista. En Venezuela ser revolucionario es sinónimo de Chavista.

3. El Chavismo es un movimiento revolucionario de carácter continental que constituye una expresión importante de resistencia al modelo neoliberal

La dirección política del proceso Bolivariano ha cometido errores de orientación y parálisis muy importantes en los últimos dos años, pero la base Chavista popular presiona para que se retome el camino de construcción inédita del socialismo Bolivariano. En ese sentido, MS debe entenderse como parte sustantiva de esta dinámica que reivindica un proyecto continental de integración, expresión actual de la premisa que la revolución no es posible en un solo país. En ese sentido debemos valorar como procesos en la dirección correcta iniciativas como la CELAC y otras organizaciones y mecanismos de integración regional surgidas en la última década, que demandan una actualización programática de las organizaciones revolucionarias en la región. No somos ingenuos, por el contrario estamos conscientes de que la denominación de gobiernos progresistas en la región, en realidad reflejan direcciones socialdemócratas empujadas por sus bases y el pueblo a ir más allá de sus propias convicciones. El progresismo es expresión de un movimiento de las masas, con flujos y reflujos, que constituye lo sustantivo de estos procesos, Es decir, los gobiernos progresistas han evidenciado una presión hacia la izquierda del movimiento de masas y esta presión aún permanece como elemento central de valoración en la tarea de construcción de una dirección revolucionaria del movimiento insurgente de las masas.

4. La gestión pública desde una perspectiva del poder popular

MS no ha participado en la gestión del gobierno Bolivariano, y a ello se suma que hemos estado restringidos de las orientaciones institucionales, principalmente por la desconfianza que ha habido de algunos altos funcionarios públicos en contra de nuestras posiciones críticas. MS defiende la perspectiva del poder popular en la gestión de lo público, aunque nuestro campo experencial está limitado a una mirada “desde afuera” respecto a la gestión de gobierno. MS no es parte de la disputa burocrática, ni tiene interés alguno en dirigir instancias de gobierno, no obstante de manera colectiva tenemos un acumulado de experiencias de gestión pública con el pueblo, para el pueblo y desde el pueblo que colocamos al servicio de la rectificación revolucionaria en el presente más allá de nuestra voz de alerta. Y, esto no es cualquiera cosa, sobre todo en este momento histórico, en cual nuestro pueblo demanda profundos cambios de orientación.

5. El Chavismo y la dirección de gobierno-partido en mundos diferentes

En el último año se ha profundizado el divorcio entre la dirección del partido (PSUV) y del gobierno respecto a los intereses, aspiraciones y sentir de las mayorías. La gobernabilidad, profundización revolucionaria y permanencia en el corto plazo de la revolución Bolivariana como expresión gubernamental en Venezuela dependerá de una profunda rectificación de los Poderes Públicos que le coloquen nuevamente en sintonía con las mayorías populares. MS-Carabobo está comprometida con esa orientación.

6. El reflujo electoral expresa un rechazo a la burocratización pero no es el cierre del despertar de las masas

La derrota electoral de 6 de diciembre de 2015 (6D) es el más importante revés electoral sufrido por el chavismo desde 1998. Esta derrota es vista por algunos sectores de izquierda crítica como el final del Chavismo; sin embargo para quienes suscribimos este documento, la derrota del 6D lo que en realidad expresa es un fuerte rechazo de la militancia Chavista y del pueblo llano respecto a la burocratización del aparato de gobierno y su manifiesta incapacidad para resolver de manera asertiva, en los últimos meses, los problemas inmediatos de la población, sin desmerecer con ello el esfuerzo por continuar las dinámicas de inclusión iniciadas por Chávez en materia de vivienda, educación, salud, etc. La inmensa mayoría de la población está consciente de la guerra económica, pero quiere al frente del gobierno acciones, decisiones, ideas y prácticas que la derroten y no que escondan sus efectos nefastos en la población con la simple definición de guerra económica. El pueblo quiere que su gobierno lo lidere para resolver, no para llorar junto a él.

7. El papel de Nicolás Maduro en la actual coyuntura

La derrota electoral del 6D coloca al gobierno que expresa en gestión pública a la revolución Bolivariana, en un riesgo cierto de ser sustituido por la expresión más recalcitrante de la derecha neoliberal continental mediante referéndum u otra iniciativa legislativa. El ascenso al gobierno de esta derecha neoliberal colocaría a los trabajadores y al pueblo en una situación de riesgo cierto de perder las conquistas alcanzadas en estos últimos 17 años. Ya los primeros anuncios apuntan a la eliminación de leyes que acompañan con un marco jurídico las luchas por estabilidad laboral, derechos de las mujeres, pensiones, salud pública, educación gratuita, entre otros. Por ello, en la actual coyuntura, sin dobleces ni medias tintas, es importante cerrar filas con el pueblo en torno a la figura de Nicolás Maduro como freno a las contrarreformas neoliberales en marcha. Esto implica redoblar el acompañamiento crítico del proceso pero defender el liderazgo de Nicolás Maduro al frente del gobierno y la revolución Bolivariana en su conjunto, presionándole desde las bases para la necesaria rectificación revolucionaria.

8. La tolerancia a la crítica revolucionaria y la superación de la política del “juego de sillas”

La perspectiva del marxismo autoritario y burocrático que se consolidó en la antigua Unión Soviética hasta su liquidación con la caída del muro de Berlín, sigue vigente en una parte de la izquierda post soviética venezolana. Los rasgos de este autoritarismo han sido criticados en distintos momentos y expresiones de los marxismos libertarios en todo el mundo y en nuestro país. Hoy en todos los lugares del planeta se vive un renovado auge de la perspectiva marxista que privilegia el debate público de las ideas tomando distancia de las dirigencias políticas quienes le temen o la satanizan para que no se le cuestiones sus errores o inconsistencias. Vivir en revolución es hacerlo en permanente debate, crítica y autocritica revolucionaria. La casi inexistencia –salvo honrosas excepciones- de canales e instancias partidarias, institucionales, mediáticas y públicas de debate y la intolerancia ante la crítica condujeron a ese rio subterráneo de inconformidades -aparentemente sepultadas por medidas administrativas de cercenamiento de la opinión- a expresarse de manera muy ruidosa mediante el voto el 6D. De haberse debatido antes del resultado electoral la inconformidad del pueblo con la gestión seguramente se habría tenido oportunidad para su corrección y evitar la catástrofe electoral para la Asamblea Nacional. Los intolerantes ante la crítica y el debate revolucionario son padres de la derrota de este diciembre. La crítica debe ser tolerada venga de un dirigente obrero, de un ama de casa, de un profesor, de un militar o de un ex ministro, venga de donde venga. Y no solo tolerada, como una odiosa concesión del poder, sino valorada sin prejuicios para que sirva de alerta temprana ante debacles como la ocurrida.
En esa perspectiva resulta un clamor de millones de voces -expresado de manera certera por el politólogo Miguel Ángel Pérez Pirela en su programa de televisión “Cayendo y Corriendo”- respecto a la necesidad de acabar con la política del “juego de sillas” para la designación de cargos. Los ciudadanos están cansados de ministros expertos en seguridad, que luego saben de educación, electricidad, comunicación y petróleo aunque su perfil profesional y experencial sea otro distinto. La nueva realidad política, institucional y gubernamental demanda la convocatoria de las voces más calificadas desde el punto de vista político y académico. La gestión pública ya no soporta más este club de amigos, socios, compadres y familiares en el que ha devenido el gabinete ministerial. Gobierno revolucionario con los más probos, profesionalmente calificados y políticamente claros en la orientación estratégica. Rostros nuevos y comprometidos militantemente con el pueblo para nuevos tiempos de revolución.

9. El eje: la batalla sindical de la clase trabajadora

Los anuncios por parte de quienes ganaron la mayoría de la Asamblea Nacional expresan el intento de iniciar una ofensiva no vista en la última década del capital contra el trabajo. Ello coloca como un centro importante de la táctica la reestructuración de la Central Socialista Bolivariana de Trabajadores (CSBT) para colocarla al servicio de las luchas de los trabajadores y, para que deje de ser ésta, sólo un vocero de lo que quiere escuchar el gobierno. La lucha sindical defensiva y de carácter reivindicativo jugará un papel estelar en los próximos meses y años. Por ello, la actual situación plantea la urgencia del reagrupamiento de las corrientes clasistas de corte chavista en el más amplio sentido. Se pone a la orden día para el chavismo sindical la convocatoria a una Asamblea Constituyente de Trabajadores y Trabajadoras para reconquistar el acompañamiento político/sindical de centenares de trabajadores y trabajadoras que fueron víctimas de los slogan vacíos del “cambio” que propusieron los candidatos de la MUD para el 6D. Este proceso de reencuentro de los comprometidos en la batalla contra las distintas expresiones de la patronal debe llamar también al movimiento sindical al balance crítico y proponerse en levantar un Nuevo Modelo de Gestión Sindical, porque el que impera ahora también está cuestionado. Las primeras luchas contra la contrarreforma neoliberal tendrán como protagonista a los trabajadores y trabajadoras, pero para salir victoriosos tenemos que prepararnos para ello.

10. Unidad de mando

Es urgente la activación del comando político-militar de la revolución Bolivariana incorporando en él, voces con liderazgo real de los movimientos populares y sociales que forman parte de la corriente Bolivariana. Esta instancia, renovada y repotenciada con la participación de voceros populares debería erigirse en el mando central del proceso en las próximas horas y semanas para evitar el ascenso de la derecha al gobierno. MS Carabobo también expresa su voluntad de apoyo en esa dirección.

11. Perdimos la mayoría

Es muy importante tomar consciencia que desde el juego de la democracia liberal burguesa en la cual decidimos construir este proceso, esta es la primera vez que perdemos la mayoría electoral más allá de un tema coyuntural (reforma constitucional). Una mayoría calificada de derecha estará al frente de la Asamblea Nacional los próximos cinco años. Esto expresa nuevas correlaciones de fuerzas y equilibrios que deben ser analizados con una mirada actualizada, eso sí, desde la óptica comprometida con la causa de los trabajadores. La acción revolucionaria debe partir de esta nueva realidad y superar los análisis que daban cuenta de la anterior situación, previa al 6D.

12. Plan revolucionario de emergencia

El equipo Operativo Nacional de Marea Socialista ha presentado un Plan de Emergencia Nacional que constituye un eje de trabajo muy importante en la disputa entre profundización revolucionaria o contrarreformas neoliberales. Este Plan de Emergencia debe construir viabilidad mediante una compleja y multireferencial campaña de unidad revolucionaria que construya puentes entre organizaciones partidarias del proceso bolivariano, el Ejecutivo Nacional y las expresiones embrionarias del poder popular y los movimientos sociales. Esta propuesta forma parte de otras que desde el campo revolucionario vienen formulando algunos economistas, deberían ser tomadas en cuenta, buscando mecanismos de consensos como los que han planteado Javier Biardeau, lo que tendría que ser parte de un nutrido debate para construir un centro de acción político viable y no solo teóricamente correcto.

13. Socialismo es inteligencia, creatividad y audacia rebelde

El peligro de un gobierno fascista y autoritario es creciente y, está a la orden del día a corto o mediano plazo, como la más segura garantía para poner en marcha un programa de ajustes estructurales con nefastos efectos en la población y para poder garantizar una transición ordenada al modelo neoliberal y sus agentes gubernamentales. Ello obliga a la izquierda revolucionaria a pensar la actual coyuntura con mucha creatividad, sin dogmas ni manuales, eso sí, comprometidos con la perspectiva de los trabajadores.

14. Una necesaria reflexión colectiva: el pueblo es el culpable?

Finalmente queremos sumarnos a las voces que alertan contra cualquier intento por responsabilizar al pueblo de la derrota electoral del 6D. En este sentido hacemos un llamado a retomar la perspectiva chavista que nos obliga a entender el comportamiento electoral del pueblo como un alerta y un proceso de construcción de inteligencia colectiva. Que no se engañe la derecha, la gente voto para castigar los errores del gobierno, no por ellos ni para dar un cheque en blanco al ascenso neoliberal en Venezuela.


Por Marea Socialista Carabobo:
Stalin Pérez Borges, Marcos Mendoza, Christian Pereira, Ismael Hernández, Franklin Zambrano



Esta nota ha sido leída aproximadamente 8696 veces.



Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Notas relacionadas

Revise noticias similares en la sección:
Trabajadores Aporreando


Revise noticias similares en la sección:
Ideología y Socialismo del Siglo XXI


Revise noticias similares en la sección:
Actualidad