No cave la menor duda que el proceso revolucionario se esta consolidando cada vez más en la población venezolana, y que aquellos que menos tenemos recursos económicos somos quienes verdaderamente tratamos por todos los medios de comportarnos como socialistas y estar pendiente de buscar, como de hecho lo hacemos con el apoyo del gobierno, las soluciones a los problemas de nuestros colectivos, sin embargó para que esto se continúe consolidando cada día mas nuestra formación Ideológica debe ser mayor.
Es lamentable como algunos que con la bandera de la Revolución logran alcanzar cargos de elección popular o altos cargos de gobierno, dejan liberar ese demonio del pequeño burgués que según Mao Tse-tung todos llevamos dentro y se enloquecen, olvidando sus raíces: se mudan del barrio, cambia la manera de vestir, compran carros de lujo y hasta abandonan a sus pareja con la cual se comieron las verdes, toman ahora whisky y derrochan ante los demás, y no olvidemos que no se ve la mano que roba, pero si se ve la mano que gasta, y ese es el detalle puesto que se enriquecen de la noche a la mañana.
Es increíble como otros tantos participantes del proceso de municipalización de la educación universitaria, pretender convertirla en la Universidad tradicional al exigir el excluyente campus universitario y sentirse superiores puesto que ingresaron a la educación superior, afortunadamente nuevamente la Revolución derriba los muros que nos separan y con la Ley Orgánica de Educación desmitifica este paradigma de la educación superior.
Esta situación no es nueva ni exclusiva de nuestro proceso revolucionario, puesto que es un comportamiento histórico de la humanidad capitalista, que debemos execrar de nuestras filas, para ello se requiere mantener la claridad ideológica y entender que nos debemos a un colectivo y no a individualidades y que esta revolución nos brinda la oportunidad de cambiar, de mejorar académicamente, económicamente de tener mas seguridad social, en fin de lograr la mayor suma de felicidad posible establecida en nuestro Proyecto Nacional Simón Bolívar, pero también nos llama a la igualdad y humildad revolucionaria.
Afortunadamente cada día son menos los que liberan ese demonio y la gran mayoría ya lo estamos venciendo y matando para que sigamos adelante en nuestra formación continúa cambiándonos a nosotros mismos y así poder cambiar a un Mundo Sustentable que revierta la situación de caos en que no ha sumergido el sistema capitalista y claro debemos estar que de no lograrlo pereceremos todos.
Por todo esto y más, Patria Socialismo o Muerte……….. Venceremos.
(*) Prof.
vjperalta@ubv.edu.ve
