El CNE del PSUV-Gobierno y de La MUD

El Consejo Nacional Electoral de estos tiempos no es el mismo órgano que tantas veces quedó reivindicado por la población venezolana. El de antes, lo que es decir, de tiempos mejores, fue  un patente, más allá incluso de su condición de poder constituido, de que habíamos superado épocas donde los cogollos políticos se repartían los votos encerrados en cuatro paredes, cual rebatiña. El CNE que se dio el pueblo venezolano con su participación como sujeto constituyente en 1999 era un reflejo más de lo que conocimos y vivimos en nuestro país; eso que aparece consagrado en la constitución con la siguiente definición: “Democracia participativa y protagónica”

Con la suspensión del acto previsto para los días 26,27 y 28 de octubre, el CNE que ha actuado atendiendo a tribunales de grado menor y sin competencia electoral, ha firmado de forma definitiva su condición espuria y baldía. Ya no es el rector que ofrecía las grandes garantías de hacer valer la manifestación popular, sino que ahora es una institución confeccionada a la medida de la antidemocracia, a la medida de las cúpulas.

La cúpula del PSUV-Gobierno desde hace rato mostro cuál era su camino y lo trajina a enorme ritmo. Erdogan es ilustre inspirador. Y la otra cúpula, la agrupada en la Mesa de Unidad Democrática (MUD), responde como tenía que hacerlo, cómo cómplice, desconcertando a su propia base social, lo cual puede notarse claramente en el anuncio que hizo el señor Ramos Allup diciendo que el tema central de la sesión extraordinaria en la Asamblea Nacional para el domingo 23 de Octubre seria la doble nacionalidad de Maduro.

Evitar “El huellazo”(I) era plana de los dos factores pulsadores de la falsa polarización. La posibilidad de ver a una enorme multitud participando en los tres días establecidos colocando su huella dactilar era un riesgo muy grande, pues ni referéndum ni consulta democrática es la salida para ellos. El desenlace que se tienen programado es por la vía del pacto (para nada está totalmente acabado), que sería precisamente el primero en quedar en sumo peligro.

La posibilidad de que la única ventana democrática que nos iba quedando fuese reventada era enorme y hasta con cinismo lo asomaban los voceros oficialistas, ante lo cual lo correcto desde una perspectiva crítica era defender la constitución y empalmar con la disposición de la gente a participar colocando su huella. El argumento del llamado a no acudir para no hacerle juego a La MUD quedó haciéndole función a las cúpulas, cosa que habrá agradecido también su CNE. En ello vimos a compañeros algo enredados, de igual manera a connotados teóricos que incluso acudieron a la definición de “chavistas” para sentenciar qué un verdadero dé éstos no firmaba.

Ante este panorama, a los revolucionarios críticos las cosas se nos ponen más cuesta arriba pero a la vez se nos abre una autopista enorme. Consideramos que debemos dar pasos al nivel de grandes exigencias. Es necesario un encuentro de las distintas plataformas que vienen trabajando desde hace rato, lo que no quiere decir que eso signifique algún tipo de limitación. Al contrario, abrirnos a la mayor cantidad posible de quienes estén dispuestos a sumarse a construir un frente por la defensa de nuestros derechos en general, un frente anti cúpulas.

La realidad política y en general ha cambiado. Lo del CNE no es un caso aislado. El primero que se distancio de su base social fue el mismo gobierno. La crisis de dirección política puede evidenciarse en dos ejemplos concretos recientes: en el metro de Caracas se están llevando a cabo enormes despidos de trabajadores y en Chacao los maestros que cobran 12.000 Bs. mensuales les ha quedado solamente por ahora la iniciativa de encadenarse ante la actitud y despotismo del alcalde Ramón Muchacho  quien se niega a reconocerles su convención colectiva. A todos ellos y a nuestro pueblo todo, ese que paga la crisis, les decimos que nos urge construir una nueva referencia política, autónoma, critica, democrática, amplia, diversa, propia de estos tiempos. Es mucho lo que nos va en esa tarea.

 

(I)http://www.aporrea.org/actualidad/a235700.html

 

Gustavo Martínez Rubio

 

 



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Gustavo Martínez Rubio

Militante de Marea Socialista y de La Liga Internacional Socialista (LIS).

 gmartinez2109@gmail.com      @gmartinezru1978

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