Las personas tenemos que estar muy claras, cuando nos hablan de historia, huellas, y todas esas frases con las que algunos personajes que decidieron incursionar en la política, nos quiere impactar, tristemente estos nuevos personajes vienen agarrados de la mano, o se alimentan de la imagen, de un gran hombre, que en su momento les dio cabida en su entorno. Ellos dicen seguir profesando sus ideales, y pareciera que son más chavistas que el líder de quien hoy se guindan, para querer asumir un papel protagónico dentro de la política venezolana, cada uno con diferentes puntos de vista, para oponerse al gobierno de Nicolás Maduro, pero en fin, pónganse del lado que se pongan y así se aprendan el Chávez Nuestro como su credo, son opositores, al gobierno chavista revolucionario,  eso no tiene discusión.

Algunos han dicho que Chávez no había pensado dejar a Nicolás Maduro como su sucesor, y tampoco pensaba que se iba a morir, ya por ahí vemos la herida abierta, como si Chávez ese gran estratega, que iba dos pasos adelante de las circunstancias, no hubiera tenido suficiente tiempo para planificar en manos de quien, dejar este país por el que tanto luchó. Y con respecto a que no pensaba morirse, uno no piensa cuando morirse, porque lo que se necesita es estar vivo, además nuestro amado Chávez luchó durante dos años con un enemigo silencioso y dañino, que no le dio tregua y con el que no se negocia, era normal que en algún momento Chávez se sentará a reflexionar sobre su propia muerte. Además no olvidemos que Jorge Giordani, nos hizo el honor de explicarnos en una entrevista, cuáles eran las condiciones físicas de nuestro líder, esas condiciones que nosotros su pueblo no veíamos y el aprovechándose de su cercanía las ventiló en público. Entonces Hugo Chávez si tuvo tiempo para pensar en su muerte y designar a quien lo sucedería, claro a él nadie le refutaba nada por eso aceptaron a regañadientes que dejara a Nicolás Maduro.

Si aquí se ponen a pensar bien, desde 1999,  el destino del país no se ha llevado como Hugo Chávez lo planificó, porque siempre se han presentado circunstancias que han cambiado los planes que se tenían previsto, Hugo Chávez nunca se preparó para un golpe de estado, ni para un paro petrolero, ni para las guarimbas, él ofreció un país de proyectos, un país de inclusión, él quería todo maravilloso, así lo transmitió, pero las cosas se pusieron en su contra en el camino y hasta el último momento, luchó con ese enemigo acérrimo llamado oposición, que fue tanto o más cruel que su enfermedad, como tampoco esperó que aquellos, que le besaban la mano (hipotéticamente) hoy en su nombre estuvieran clavándole una puñalada a Nicolás Maduro. Acusándolo de traicionar el proyecto revolucionario, cuando a pesar de la situación por la que atraviesa el país, el presidente se ha mantenido incólume luchando por mantener viva la palabra y el compromiso  de Hugo Chávez con el pueblo. Que no es otra que seguir otorgándole los beneficios sociales al pueblo más necesitado Con grandes dificultades, y en ocasiones con decisiones erradas, por las circunstancias que se le presentan, pero gracias a él todavía podemos decir que vivimos en paz, en Venezuela.

Hoy hemos olvidado todo lo que dijeron de Chávez, cuantas veces criticaron las políticas del entones presidente de la república, cuantas veces lo vilipendiaron, cuantas veces lo traicionaron, cuantos corruptos salieron de su entorno, vestidos de rojo, cuantas veces callaron aquellos que hoy se han vuelto pico e plata.

Esa es la historia reciente que ha dejado huella en este país, la historia de aquellos que olvidan muy pronto, cuando estuvieron allí escribiéndola y hoy se arrojan como lobos sobre un hombre, que para dolor de muchos se ha mantenido leal, al hombre que puso una gran responsabilidad sobre sus hombros y no ha salido a venderse al mejor postor y no lo han abandonado las fuerzas para luchar.

Ahora las huellas que dejan historia, tenemos el ejemplo más vivo que nunca, Hugo Chávez una huella que sigue marcando pauta en el mundo, y que va creciendo a medida que se va escribiendo la historia. No podemos confundirnos no todo aquel que quiera escribir historia deja huella en ella, porque a veces pasan a la historia sin pena ni gloria.