27-11-14.-“En nuestro país hemos tomado las previsiones, nuestro presupuesto está hecho a 60 dólares el barril y está preparado para cualquier circunstancia, pero por supuesto que nadie dentro de la Opep está satisfecho con un precio de petróleo que esté debajo de nuestras expectativas y todos tenemos el interés común de mantener estabilidad en el mercado y una recuperación progresiva, en estos temas no hay cosas milagrosas”.

La afirmación fue hecha este jueves por el canciller y representante de Venezuela ante la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep), Rafael Ramírez, luego de la reunión del bloque, que votó por mantener el techo de su producción conjunta de crudo en 30 millones de barriles diarios (MBD).

“Acordamos que este año 2015 el presidente de la conferencia, que este año le corresponde a Nigeria, dada la necesidad se convocaría a una reunión para seguir evaluando de cerca qué está pasando con el petróleo”, afirmó.

Consultado sobre el escenario petrolero que ha venido sufriendo una baja sustantiva en los precios, afirmó que “el mercado mundial de petróleo tiene algunos temas que tienen que ver con la severa crisis económica en las grandes economías desarrolladas, sobretodo la europea que sigue arrastrando hacia una disminución de la demanda”.

También entran en juego “nuevas ofertas como el petróleo de esquisto que ha introducido importantes volúmenes en el mercado”.

Ramírez asomó un tercer elemento “y tal vez el que tenga más peso” que tiene que ver con “factores geopolíticos que juegan en presionar a través de la vía económica o la petrolera sanciones contra países o situaciones de desestabilización, de manera tal que es un panorama complejo”.

Ramírez defendió ante la Opep la necesidad de retirar del mercado dos millones de barriles diarios, para frenar el desplome de los precios.

"Fue una reunión difícil", confió una fuente cercana a la delegación venezolana, tras el anuncio este jueves en Viena de que la Opep mantendrá su techo conjunto de producción, que se sitúa en 30 millones de barriles diarios desde 2011.

"Debemos retirar del mercado la sobreproducción" de petróleo, dijo, antes de la reunión, el representante de Venezuela ante la Organización de Países Exportadores de Petróleo, destacando que un recorte ayudaría a estabilizar los mercados.
La Opep decidió no recortar su producción, a pesar de que Venezuela contaba, según lo señaló el mismo Ramírez, con apoyo de varios de los doce países miembros del cartel, que llamaron en Viena a un recorte, que era también deseado por los mercados.

"Muchos países comparten nuestra evaluación de la situación del mercado" y "la preocupación por los precios", dijo Ramírez.
"Los precios no son buenos", enfatizó en Viena el canciller venezolano, quien salió de la reunión -una de las más importantes de los últimos años - visiblemente crispado y decepcionado.

Mientras, el secretario general de la OPEP, Abdalá Salem El Badri, anunciaba en la sala de prensa la decisión de la OPEP.
"Conforme con el interés de devolver el equilibrio al mercado, la Conferencia" ministerial de la OPEP "decidió mantener el nivel de producción de 30 millones de barriles diarios", leyó El Badri.

El ministro saudita, Ali al-Naimi, había desestimado en Viena la sobreoferta de crudo en el mercado, señalando que debía ser el mercado el que regule el precio del crudo. "El mercado va a estabilizarse solo, eventualmente", aseguró Naimi.

Por su parte, la ministra de Petróleo de Nigeria, Diezani Alison-Madueke, que fue designada el jueves presidenta de la OPEP - la primera mujer en ocupar ese puesto - señaló que países productores no miembros de la OPEP deberán "compartir la carga de la caída de los precios del petróleo".