Sembremos ahora para recoger 140 desparramados años de petróleo

Venezuela toda una esperanza potencial agrícola hasta el día que se envió el primer barril de petróleo "a su majestad Carlos V en 1539" para aliviar su gota. Nuestro ingenuo pueblo originario le llamaba mene, se utilizaba con fines medicinales, como fuente de iluminación y para calafeteado de canoas.

En 1855 Alejandro von Humboldt encontró un pozo de petróleo en la Península de Boyacá[cita requerida]. Ya para 1869 el gobierno encomienda al médico José María Vargas para que investigara sobre el petróleo. Una vez hechas las respectivas averiguaciones, opinó que esta materia era más rica que la plata por la gran posibilidad de uso que tenía. En esa solo se utilizaba el petróleo para cosas muy sencillas y su extracción era bastante rudimentaria y no se explotaba en forma industrial. El primer pozo que se explotó en forma industrial en el mundo fue en 1859 en Pensilvania, Estados Unidos, y su propietario fue Edwin Drake. Pero en Venezuela se empieza a explotar el petróleo a partir de 1875, después de un terremoto comienza a salir petróleo en grandes cantidades por una de las grietas producidas por el movimiento telúrico en la hacienda "La Alquitrana" del Estado Táchira perteneciente al Señor Manuel Antonio Pulido. A raíz de este hecho Pulido forma la primera empresa petrolera Venezolana que se dedicó a explotar industrialmente al petróleo. La empresa se llamó "Compañía Nacional Minera Petrólia del Táchira" o "Petrolia del Táchira". Más tarde se construyó la primera refinería la cual se producía mensualmente 60 galones de gasolina, 165 de querosén, 150 de gas-oil y 220 de residuos. De estos derivados del petróleo, el querosén era el de mayor utilidad, se utilizaba para el alumbrado y para las primeras cocinas.

Opinión compartida por si se quiere por todos los venezolanos a excepción de los depredadores de la patria que solo les favoreció enriquecerse y tener poder; son el virus latente de los pormenores de poder haber crecido, pero no, nos sembraron la dependencia como norma de su fantasía democrática:

Después de leer e investigar sobre este tema nos llamó la atención como la economía durante toda la historia de nuestro país ha sido monoproductora y monoexportadora.

En el período de la Venezuela agraria fueron primero el cacao, luego el café y hoy en día, casi 100 años después, es el petróleo. Ésto ha hecho que nuestra economía dependa de los mercados internacionales, ya que cualquier caída brusca de la producción y de los precios lleva de inmediato a una crisis económica.

Por eso pensamos que la gran cantidad de recursos que provienen del petróleo deben invertirse en sectores como la agricultura, el turismo, la minería, ganadería para tener una economía más fuerte con múltiples productos y no depender de uno solo.

Acariciar los esfuerzos mancomunados entre pueblo y pueblo gobierno es nuestra única salvación para superación de esta ingeniera-crisis-industrial económica, bien planificada desde los factores del más mínimo detalle anti-productivo; estamos combatiendo cuerpo a cuerpo contra el poderosísimo mundo de la mercancía que ordena quién come, qué comen, de qué viven y a quién pagan, mas, no olvidemos que somos muchos, que tenemos mucho, no olvidemos que poseemos los elementos para autoabastecernos de la arepa de cada día y que con solo lograrlo le estaremos propiciando una derrota y a la vez rectificando nuestros tuertos errores, por aquello: de que los golpes enseñan, ya no hay segunda oportunidad, está, es única y exclusiva, pasa el delgado hilo de la suerte para corregir a profundidades, y aunque no deje de ser político, su solución es directamente operacional y de súbitos resultados.

No nos colguemos ni de la burocracia de Estado ni de la inútil distracción con el enemigo interno, sus bufonadas nos retardan las acciones precisas, vamos al grano o al meollo, seamos políticos agricultores, productivos en la palabra y en los hechos materiales primordiales para que veamos junto al pueblo el queso a la tostada popular. Un solo amplio plan abierto, discutido, debatido, corregible, participativo, pero de constante empuje progresivo. Activémonos todos en La Misión Somos Productivos; millones de manos al campo a la producción y ni $ más a los hambreadores, nuestra independencia depende de nosotros mismo, no le busquemos la 5 (V) pata al gato.-

Valencia, 31 de enero de 2016

 



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Omar Ignacio Pinto


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