¡Por fin Venezuela empezará a cobrar por la gasolina que moviliza a la nación!

La madurez política que nuestro Comandante Chávez sembró en la conciencia del pueblo y la inmensa inversión social que la Revolución Bolivariana ha hecho en los últimos quince años nos ponen en el momento justo para avanzar con un tema que ha sido tabú en la política nacional de las últimas décadas.

El fantasma del 27 de febrero, que los analistas neoliberales calificaron como “saqueo por turbas populares” ha sido históricamente asociado al aumento de la gasolina. Pero todos sabemos que eso no es verdad. Porque el telón de fondo fue la ostentosa “coronación” de Carlos Andrés Pérez y el implacable paquete de medidas neoliberales que los gringos le impusieron al país como condición financiera.

Cuando el pueblo caraqueño explotó en rabia no lo hizo por la gasolina. Lo hizo en protesta al descaro adeco que engañó, una vez más, a las masas hablándole de prosperidad cuando en realidad venía un ajuste criminal en la economía.

Hoy estamos muy lejos de esos escenarios. Porque el Pueblo venezolano sabe que el Gobierno Bolivariano lo ha puesto de primero, como Soberano, en la prioridad de inversión. Chávez lo dijo claramente: “La Economía Humana, el Hombre primero, la Patria primero”. Y así lo cumplió y dejó establecido.

El Gobierno Bolivariano, primero con nuestro Comandante Eterno y ahora con el Presidente Obrero Nicolás Maduro, ha priorizado la inversión social en salud, protección del empleo, subsidio a los alimentos y protección del consumo familiar. Por eso, hoy podemos decir, que Venezuela está lista para ajustar el precio de la gasolina. Un acto de amor con el país que es impostergable y necesario.

El ministro Rafael Ramírez expresó de forma afortunada la verdadera situación del mercado interno de combustible cuando afirmó que “ya era hora de empezar a cobrar la gasolina, pues hasta el momento la hemos regalado”.

El aumento del combustible es un acto racional a favor de la economía nacional y un hecho que nos obliga a entender que la energía tiene un costo que vale la pena pagar. Este esfuerzo que ha hecho el Gobierno Nacional subsidiando la gasolina y el gasoil a precios imposibles ha sido pervertido por los pícaros de siempre, que se aprovechan de la generosidad de la Revolución Bolivariana para hacer negocios que afectan nuestra economía.

En este momento histórico el PSUV debe ponerse en la primera fila del combate, asumiendo la indispensable tarea de explicar a todos y cada uno de nuestros vecinos y militantes el por qué de esta medida, poniéndola en contexto y comparando precios de un líquido tan difícil de producir, como la gasolina, con el precio de una botella de agua, jugo o bebida gaseosa.

Esto será una prueba de fuego para todos los militantes del PSUV porque tenemos que ser responsables y pagar a un precio justo, que siempre será diez veces menor que el del mercado internacional, para dar ejemplo y ayudar al Gobierno del Presidente Maduro a explicar y convencer sobre lo útil y bueno que será el aumento del combustible.

A la larga este aumento de la gasolina deberá convertirse en un aumento en la calidad y cantidad del transporte público que es lo más moderno, sensato y ecológico que debemos tener.

Con este incremento necesario la gente consumirá con más conciencia, ya no veremos a esos derrochadores que salen a dar vueltas innecesarias en los carros o permanecer con los vehículos encendidos como si fueran una sala de espera, sino que iniciaremos una etapa de madurez política y ciudadana en la cual el pueblo hará conciencia de lo que cuesta producir y distribuir la gasolina venezolana, que seguirá siendo la más barata del mundo.

Debemos salir al paso de los irresponsables de derecha que quieren confundir a nuestro pueblo condicionando este ajuste de la gasolina a la eliminación o reducción de PETROCARIBE y los convenios energéticos que nos han permitido ser un país líder en la comunidad del Caribe, en la OEA y en la CELAC. Esos apátridas no nos perdonan que, gracias a PETROCARIBE y el ALBA, Venezuela ha sido protegida con los votos de las naciones integrantes de esos convenios de los ataques diplomáticos que ha sufrido la nación desde Estados Unidos y su muy manipulable OEA, esa organización agonizante que el Comandante Fidel Castro llamó, una vez, "el Ministerio de las Colonias" de Estados Unidos de Norte América.

Desde Carirubana, como Alcalde de la ciudad sede del CRP, que es el epicentro de la producción gasolinera en el país, haremos todos los esfuerzos necesarios para defender el justo e impostergable aumento de la gasolina, pero también lucharemos para que el dinero que se recaude por este aumento se dedique a incrementar y mejorar el transporte público nacional a través de la Misión Transporte y los programas de solidaridad que nos caracterizan. La meta es lograr la mayor movilidad con transporte público amable, eficiente y moderno. Lograrlo será ponernos a la altura de las grandes ciudades del mundo.

*Alcalde de Carirubana (Punto Fijo – Falcón)


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