Maracaibo, 31 de marzo de 2014.- La Universidad del Zulia (LUZ) está abierta, pero según los estudiantes, sólo en teoría. Desde el pasado 13 de febrero la paralización de actividades académicas ha sido escalonada. En un principio el paro fue justificado por las autoridades universitarias para "resguardar" la seguridad de los estudiantes, tras las guarimbas de grupos violentos, pero hasta la fecha no se han restituido en su totalidad las clases.

"Las autoridades dijeron que los estudiantes podíamos regresar a Luz, que ya se reiniciarían las clases. Llegamos y nos encontramos con el portón cerrado en su acceso por la avenida Ziruma. Cuando por fin logramos acceder no sólo nos encontramos con los salones cerrados sino que además los profesores no asistieron", relató Jairo Velarde, estudiante de derecho en esa casa de estudios.

El reinicio de clases en Luz fue bajo ciertas condiciones. Las clases teóricas o prácticas sólo serán válidas si cuentan con el 75% de la asistencia estudiantil; las evaluaciones quedan suspendidas así como la aplicación del Reglamento de Asistencia; el personal administrativo y obrero sólo laboraría medio día en horario crítico y el transporte estudiantil se activaría progresivamente.

Son 64.000 estudiantes que esperan continuar con sus estudios y, en su mayoría, han salido a las calles a protestar por la falta de atención de las autoridades universitarias quienes, sin anunciar medidas más concretas en cuanto al tema de la seguridad. Los rectores sólo ofrecen mensajes a la comunidad estudiantil a través de las redes sociales cuando inicia un nuevo cese de actividades por actos violentos dentro de la institución universitaria o cercanas a ella.

Gustavo Vera, vocero estudiantil de Luz, considera que la única salida a la crisis universitaria en el Zulia es a través de las autoridades nacionales.

"Cuando en Venezuela, y específicamente hablando del Zulia, han sido algunos grupos de jóvenes violentos los que han querido incendiar a Maracaibo, te pones a pensar qué es lo que ellos necesitan para seguir haciendo estas acciones y la respuesta básicamente es tiempo libre. Mientras la universidad no abra las puertas y restablezca su régimen de asistencia, canalice una mayor seguridad dentro y fuera de la institución, y obligue a sus profesores a evaluar y a avanzar en el contenido programático, esto no va a cambiar. Si verdaderamente quieren que los estudiantes regresen no establezcan condiciones", añadió.

La lucha de los estudiantes para que se reinicien las clases ha contado con el apoyo de los representantes regionales del Ministerio de Educación en el Consejo Universitario de la Universidad del Zulia.

Doris Chirinos, representante del Ministerio en la entidad, ha reiterado la necesidad de que en Luz se den las condiciones para un verdadero inicio de clases, además de solicitar un pronunciamiento por parte de las autoridades universitarias a favor de la paz y la reconciliación en la comunidad estudiantil.

Instó a mantener al recinto universitario como un espacio de encuentro y de paz.

Enfatizó que cualquier decisión de las autoridades no puede estar por encima sobre un derecho fundamental como lo es la educación: "Si LUZ hubiera publicado un comunicado donde se llamara a la paz, estoy segura que hubiese habido una influencia positiva, pero hasta ahora no ha pasado", reflexionó.

Aunque por un nuevo "conflicto gremial", informado a través de la Agencia Oficial de Noticias de LUZ, la universidad volvió a cerrar sus puertas hasta el próximo lunes 31 de marzo, los estudiantes confían en que podrán culminar sus semestres sin mayores complicaciones.

Mientras los días trasncurren, los estudiantes apuestan al reinicio de actividades, sin ningún tipo de condiciones que retrase sus procesos acádemicos y que no vulnere su derecho a la educación.