La suplencia docente en nuestro sistema educativo se ha venido pervirtiendo de una manera escandalosa, pues ya no se trata de recurrir a esa figura, por demás plenamente justificada, cuando se trata de reemplazar interinamente y por un lapso corto o relativamente corto, a un@ docente titular que por enfermedad o por alguna otra razón de fuerza mayor, prevista en los reglamentos disciplinarios del Ministerio del Poder Popular para la Educación, tenga que separarse de su cargo, sino que se ha venido utilizando de manera irregular y cada día pareciera que en mayor escala, para avalar conductas impropias de algunos cuantos personajes de ese entramado educativo que salen constantemente de reposo con justificativos "chimbos", como decimos en criollo e, inclusive, y esto sucede en cantidad significativa, logran extender esos reposos por meses y hasta por años. Hemos tenido conocimiento oficioso, que algunos cuántos de esos sujetos salen muy campantes a disfrutar esos días de supuesto "reposo" hacia el exterior, lo que no sólo ocurre ¡ojo…!, con los docentes, sino en general, con funcionarios de cualquier ente público.
Pero por ahora nuestra inquietud son los docentes y a eso nos referiremos, porque no solamente está ocurriendo en sus espacios tal irregularidad, sino que la misma genera una grave problemática que trae de cabeza a cientos de responsables de infinidad de Unidades Educativas a todos los niveles y en todo el país, para sufragar de manera regular el pago del sueldo de ese personal docente interino, gestión esa que le compete exclusivamente al ministerio de Educación o, en su defecto, cuando ocurren retardos inesperados, los que, en su gran mayoría, hay que decirlo, son inexplicables, a la Comunidad Educativa o Comité de Padres y Representantes, siempre que para ello la respectiva Zona Educativa extienda la respectiva autorización, en cuyo caso ese adelanto de pago deberá ser reembolsado.
¿Pero qué sucede?, simplemente que en el Ministerio se retardan por largo tiempo los pagos de las remuneraciones a las que está obligado a cancelar oportunamente y mientras tanto, la Zona Educativa correspondiente se niega a expedir la autorización para que los Padres y Representantes, a través de su Comité de ley, adelanten su cancelación, bajo la condición indicada del reintegro, provocando así una grave crisis que empuja a los interinos a abandonar sus responsabilidades, simplemente porque llega un momento en que se les hace insostenible continuar alargando la espera por unos salarios que nunca les llegan.
Se los coloca en situación terrible tener que cumplir con sus responsabilidades día tras día, sin cobrar un centavo y durante meses y meses. Conocemos de casos que llevan más de un año sin cobrar un centavo y algunos se mantienen allí por amor a su profesión y porque tienen en su grupo familiar quien los apoya y les extienda la mano para que lo hagan, pero la inmensa mayoría no cuenta con ese respaldo y la única opción que les queda es "tirar la toalla". Abandonan el interinato y con ello le generan a la Unidad Educativa un tremendo problema que sus directos responsables no tienen la forma ni manera de resolverlo.
Vale acotar que esos docentes en calidad de suplentes sólo cobran los días que concurren a la escuela, es decir que no les pagan los sábados, los domingos ni los días feriados y, además, no gozan de ningún otro beneficio laboral, por lo que ya se imaginan las condiciones infamantes en que se encuentran "contratados", a quienes la sociedad, como vemos, los tiene ubicados en la praxis como de segunda. ¡Increíble que ello esté sucediendo, por es así, totalmente cierto…!!!
¿Cómo resolver este gravísimo problema que mantiene y lo reiteramos, en angustia y zozobra a cientos de directores de Unidades Educativas regadas por todo el país, al verse que se quedan sin los docentes que se requieren para garantizar el mandato expreso y sagrado de nuestra Constitución Bolivariana de asegurar una educación de alta calidad?
El Ministerio deberá con urgencia revisarse internamente para que se verifique si esta perversidad que entorpece sobremanera el desenvolvimiento normal de nuestras escuelas públicas, sucede por indolencia, incapacidad o malas intenciones de algunos cuantos burócratas que le sirven a esta oposición golpista y apátrida que tenemos...
Hasta la fecha, las Unidades Educativas se han venido bandeando con nuevos suplentes que sustituyen a los que no aguantaron más y, por supuesto, a esos nuevos que logran ser reclutados, nada se les garantiza, asegurando con ello -únicamente- que el ciclo se irá repitiendo una y muchas veces y por supuesto, ofreciéndole a nuestros hijos y nietos una pésima enseñanza, porque en todo momento, así lo hemos sabido, ninguno de esos recién llegados tienen credenciales de maestr@ egresd@ de una universidad o de un colegio universitario o tecnológico, pues lo único que se logra conseguir, bajo esas condiciones denigrantes referidas, es una persona con muy buena voluntad, sin duda y urgida del puesto de trabajo que fuere y quizás con una educación media concluida y/o, adicionalmente, con uno o tres semestres de alguna carrera universitaria, pero ninguna podrá demostrar que posee conocimientos reales y concretos en el tema de la docencia, de ningún nivel, ni para educación preescolar, ni primaria, ni media…
El Ministerio de Educación conoce a plenitud esta situación que sucede con el caso de las suplencias en toda su dimensión, pero no actúa y no entendemos las causas de que no le haya encontrado una satisfactoria solución a la misma, cuando esa es una de sus mayores retos, hacer que funcionen con total normalidad y eficiencia nuestras escuelas públicas de todo el país.
De manera que abogamos porque el nuevo ministro de Educación asuma el reto de encontrarle una salida airosa a este problema que pareciera que a nadie le interesa, pues vemos que sectores de la oposición que tienen tanta gente enchufada en sus instancias de gerencia media y hasta alta en ese ministerio (realidad perfectamente comprobable, cuyas cifras, inclusive, no creo que se desconozcan), hayan planteado alternativas viables para solucionarlo.
Claro, sería ingenuo de nuestra parte pensar, por un segundo, que esa genta pudiera tener interés alguno en hacerlo y menos en estos momentos cuando tenemos muy cerca las elecciones legislativas del 6/12…
No queremos cerrar esta nota, sin antes aprovechar la ocasión para solicitarle al gobierno que le ponga la lupa a la situación de nuestr@s maestr@s, a todas las escalas, con vista a que se les reconozca el inmenso valor del trabajo que cumplen en el país, enseñando y preparando a nuestros jóvenes que siempre serán, en todo tiempo, la esperanza del futuro grande de la Patria, con vista a que examinen la urgente necesidad que tiene ese gremio por salarios que compensen y dignifiquen tan extraordinaria labor que realizan, por la vía de la aprobación de un tabulador de sueldos y salarios que los coloque, por lo menos, al mismo nivel en que se encuentran a la fecha otros profesionales, como, por ejemplo, los médicos y los ingenieros…
