El pueblo de Guaicaipuro, ciudad de Los Teques nos recibió con un mural: Robert, tu cara espléndida, pared completa y una consigna: “ NOS TIENEN MIEDO, PORQUE NO TENEMOS MIEDO” . Eso eres tú, carajito……. Hiciste volar la mente lejos, aterrice en Haití ¿por qué? No sé. Recordé que un día descubrí a Makandal en esa tierra de heroínas, héroes y holocausto vigente. Jungla africana tembandumba, fuerza de un hombre frente a una hoguera que no pudo con él…misterio de los Orishas, antíguos, vigentes, presentes y el fuego multiplicó la fuerza del sacerdote valiente: hizo metamorfosis en la naturaleza para quedarse definitivamente.
Tráfico, un frenazo, sale Makandal y entra en escena el Comandante eterno. Chávez, camarada, tu como siempre al llegar lo inundas todo….recibiste al chamo, con tu risa de siempre: caramba tiempo récord! Prepara boleto de regreso, muchas cosas pendiente!
La partida del Comandante llenó todos los espacios, sin tregua día y noche, le puso tinta al lápiz…miles de papeles trazados, insomnio, palabras intensas, prosa y poesía a granel….
Contigo Robert, se me inutilizó el abecedario, la musa escapó de mis manos y el niño travieso que hay en ti, no me dejó trazar palabras hasta hoy. La consternación y el desconcierto ante tanta maldad calculada y celebrada colmaron todos los espacios, sagrada la vida, sagrados los niños, nos ha golpeado este abominable hecho, sin que se borre tu risa infantil. Prohibido olvidar, el trecho es largo y en él, eres tiempo presente en nuestras vidas.
