Ciudad Guayana, 4 de mayo de 2012- Las autoridades del Sebin llamaron a declarar a Lesme Negrin (jefe de Planificación), Douglas Paredes y Daniel Labrador (asistentes de presidencia de SIDOR), quienes aparecen presuntamente involucrados en el robo de 18 millones de dólares por comercializar residuos de aceite de la Siderúrgica del Orinoco Alfredo Maneiro (Sidor).
“Tibisay Medina, coordinadora de la comisión de abastecimiento, durante una inspección de rutina , encontró despachos irregulares de residuos de aceite de SIDOR. Por tal motivo, decidió denunciar esta situación que no es legal, ya que no se cumplieron los pasos establecidos para la venta de los materiales del patrimonio de esta empresa pública del Estado venezolano”. Así lo señaló José Meléndez, El secretario de Organización del Sindicato Único de los Trabajadores de la Industria Siderúrgica y sus Similares (SUTISS) y dirigente de Alianza Sindical, organización sidorista que cuenta con la mayoría de los cargos en dicho sindicato.
Según Meléndez, luego de que Medina denunciara el acto de corrupción, ha sido víctima de intimidaciones que afectan su estabilidad psicológica y la hacen temer por su integridad física y la de su familia.
El directivo dijo que “presuntamente en los documentos de comercialización aparecen avalando la venta del aceite, Douglas Paredes, asistente administrativo de Sidor y Daniel Labrador asistentes del presidente de la empresa Carlos de Oliveira”.
Aseguró que “ahora podrá quedar claro quiénes son los verdaderos malandros de SIDOR, después de que Alianza Sindical tuvo que soportar una larga campaña de calumnias y de intentos de criminalizar a su dirigencia. A estos señores que permanentemente acusan de corrupción a cualquiera que no apruebe sus acciones, se les cae ahora la careta, cuando sus allegados aparecen señalados como incursos en hechos delictivos y de corrupción”. Se pregunta hasta dónde pretende llegar el responsable de las comunicaciones dela empresa SIDOR, Carlos Méndez, a quien señala como uno de los responsables de las campañas contra Alianza Sindical, junto con José Gregorio Vargas y Duglas Paredes, “brazos ejecutores de Carlos de Oliveira, presidente de la empresa, así como Lesme Negrin, a quien califica como “ficha de Ternium”, la antigua propietaria de SIDOR. El sindicalista planteó que “por moral”, De Oliveira debería poner el cargo a la orden, puesto que, desde su punto de vista, que “toda esta situación de estafa al patrimonio de los trabajadores, ocurre bajo la mirada complaciente del presidente de la siderúrgica”.
Agregó que “no es posible que se roben 18 millones de dólares mientras urge la discusión del contrato colectivo, que lleva dos años vencidos, así como el retroactivo y se mantenga el problema del mal cálculo de tabulador, la hoja de cálculo y la diferencia de utilidades.”
A Jesús Farías, diputado a la Asamblea Nacional, quien en varias oportunidades acusó a la Alianza Sindical de estar involucrados en actos de corrupción, sin tener ningún tipo de pruebas, le envía un mensaje en el sentido de que revise su rol en las relaciones con la empresa y los trabajadores de SIDOR. “Esta vez el cazador salió cazado”, concluyó José Meléndez, quien se pregunta: “ ¿Acaso no está enterado el presidente de la empresa de lo que sucede en este departamento tan importante en el tren gerencial?”.
Dijo que pese a que no son detectives, conocen de otras irregularidades que deben revisarse, como por ejemplo: caso HYL, Ferresidor, Post-carriers, Decapado, entre otros.
Meléndez, opina que “con la corrección de este tipo de situaciones se puede hacer justicia social y mejorar la situación de la empresa, puesto que son 18 millones de dólares que pueden invertirse en la misma planta para aumentar su producción e ingresar algunos hermanos tercerizados, dando así cumplimiento al decreto del presidente Hugo Chávez de erradicar la tercerización”
Felicitó la actuación de Medina y le aseguró respaldo y apoyo de la dirigencia sindical que lidera. Instó a los trabajadores y trabajadoras a seguir ejerciendo la contraloría social en la empresa como una de las acciones que ayudarían a rescatar el control obrero