Como ya es público y bien sabido hace unos días varios presos (no me gusta llamarlos "privados de libertad" porque no se bien de cual libertad están privados), subieron al techo de la cárcel de Margarita y manifestaron su duelo haciendo algunas detonaciones. En seguida los operadores comunicacionales de la derecha se dieron a la tarea de hacer un genial video que recorrió todas las redes sociales, el video es más o menos así:
Comienza con la flamante Ministra del Sistema Penitenciario declarando… -aquí se va a acabar el tráfico de armas, de drogas, caiga quien caiga- en seguida aparece aquella imagen taka taka taka taka taka taka ratatatatatatatatatatatatatatatatata ratatatatatatatatatatatatatatatata taka taka taka taka taka taka taka ratatatatatatatatatatata varios presos accionan las más variadas y poderosas armas bélicas que seguramente serian envidiadas por los comandantes del ISIS; las balas, al parecer no son un problema, es evidente que eso no escasea en la cárcel de Margarita.
Luego vuelve a aparecer la Ministra, esta vez diciendo que la derecha quiere hacer ver como que las armas en las cárceles entraron en estos 16 años y antes no había. Todos sabemos que eso no es así yo recuerdo la cantidad de chuzos y chopos (pistolas de fabricación casera), que habían en las cárceles de la 4ta república; apenas termina la frase, vuelve otra vez la imagen, taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka ratatatatatatata ratatatatatata ratatatata ratatatatata ratatatatatata ratatatatata ratatatatata ratatatatatatatatata son muchas ráfagas, el sonido es inconfundible, son balas que colman el cielo de aquella paradisíaca isla gobernada por la revolución durante los últimos años.
Después otra vez la Ministra; esta vez sale diciendo que "ya hay varias cárceles en donde no hay ni una hojilla, cero armas (tiene razón, por ejemplo en la cárcel de sabaneta en Maracaibo ya no hay ningún tipo de armamento), y apenas termina de decir eso vuelve la imagen, ratatatatatatatatatata ratatatatatataata ratatatatatata ratatatatata ratatatatatatata taka taka taka taka taka taka taka taka taka ratatatatatatatata los distintos tipos de ráfagas se superponen, pareciera un montón de gente disparando al azar sus armas de guerra, pero al escucharlo varias veces se puede notar una cierta armonía, por ejemplo se escucha el AK-47 detonando a toda máquina y entra una 9 milímetros con un cargador más grande que el pistolero que la porta, es como si fuera una orquesta y justo entrara el violín con todos los instrumentos de cuerda detrás; termina el video con el Presidente Nicolás Maduro diciendo que mientras más ve el sistema carcelario del mundo, más admira a Iris Varela y es por eso que la ratifica en el cargo, apenas termina la palabra "cargo" el video se va negro y se escucha de nuevo ratatatatata ratatatatatata ratatatatatatata ratatatatatatatata ratatatatatatatata taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka ratatatatatatatata ratatatatatatatata ratatatatatata ratatatatatata ratatatatatata ratatatata ratatatata ratatatata ratatatatata ratatatata ratatatatatatatata ratatatatata ratatatatatatatata ratatatatatata ratatatatatatatata ratatatatatata.
Después de ver ese video, me quedé pensando en la historia de algunos protagonistas, primero me imagine la historia del reo que se ve más cerca de la cámara, me imaginé que sería alguien que por alguna circunstancia de la vida un día decidió matar a una persona, bien sea para robarle el celular o los zapatos, o quizás asesinó a un policía para robarle el arma y fue a parar a la cárcel, donde ya más tranquilo y cómodo, puede extorsionar, planificar mejor sus fechorías y oprimir a los demás compañeros de recinto, la historia de sus secuaces debe ser parecida a la de él; pero la historia del kalashnikov no, esa historia es distinta, creo que ese kalashnikov fue fabricado en Rusia y en un viaje del presidente Chávez a aquel país, Putín se lo vendió a crédito con sus respectivos intereses; mis bisnietos lo terminarán de pagar, pero la patria lo necesitaba, el asedio del imperio sobre el proceso revolucionario hacía necesaria esa adquisición, el kalashnikov fue enviado a Venezuela y cuando llegó al puerto de la guaira fue nacionalizado mucho más rápido que unos contenedores de leche y granos que estaban parados por trámites burocráticos, fue puesto bajo la responsabilidad de alguien y luego, después de varios meses, de alguna manera un visitante fue a la cárcel de Margarita y metió el kalashnikov en una arepa de reina pepiada, burlando así genialmente los sistemas de seguridad y control hasta que cayó en las manos del malandro que hoy lo porta… Ratatatatatata ratatatatatatatata ratatatatatatata ratatatatatatata ratatatatatatata ratatatatatata ratatatatatata taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka taka ratatatatatata ratatatatatata ratatatata ratatatatatata ratatatatatata ratatatatatatata ratatatatatatata ratatatatatatata ratatatatatata.
