El 22 de marzo El Universal publicó el artículo del presidente de Italcambio Carlos Dorado: ¡Dólar Today! Quisiera dialogar con ellos, y explicarles el irreparable daño que le están haciendo al país.
Tres cosas se agolparon a mi mente: primero, una denuncia que hiciera 10/01/08 ¡Los tenemos jodidos! (II) 1 sobre la que estoy seguro la oposición venezolana y los intereses extranjeros tomaron mayor ventaja y profundizaron a grado superlativo la agresión, algo que me ha hecho repensar en seguir denunciando o reflexionando, porque cierto es que al gobierno no parece importarle el aporte de los intelectuales en hacer los correctivos de las tres RRR. La aseveración de Carlos Dorado, desde mi punto de vista es una evaluación de las acciones premeditadas por los desestabilizadores del país.
La segunda cosa que se me viene a la mente son reflexiones sobre dinámicas que contradicen toda lógica de capital y de mercado: por una parte, hace algunos meses me entere la enorme demanda colombiana de nuestros billetes de 100 Bs allá se compraban esos billetes por 120 Bs, me parecía una locura, el Edo. Venezolano lo sabía, porque incluso en varios foros le dieron el nombre de centrífuga.
En función del trabajo que vengo realizando a lo largo y ancho de Venezuela me enteré de que nuestras materias primas para fabricar alimentos balanceados o mezclas de ellas sin mayor calidad, eran vendidas entre 850 y 900 Bs/saco en lugares cercanos a la frontera, pero en la frontera misma el precio del saco de esos pseudo alimentos era 3.000 Bs en Apure y 2.500 Bs en el Zulia para llevarlos a Colombia. Lo que más me sorprendió es que venezolanos compran el saco de esos pseudo balanceados a 1.900 Bs en Colombia para traerlos a Venezuela. Eso me recordó el caso de la papa colombiana en la década de los 90, muy cara allá en Colombia, era vendida aquí en Venezuela por debajo del precio de costo de la papa en Colombia y Venezuela, desestabilizando la cadena productiva de papa en Venezuela.
Por más que trato de buscar la lógica del mercado me es difícil entender cómo perdiendo yo gano, salvo que estemos insertos en una enorme lavadora de dineros ilegales con dos o más fines interconectados: “legalizar capitales” y/o inducir una hiperliquidez que envuelva a los venezolanos en una espiral inflacionaria más allá del bachaqueo de extracción de gasolina, medicinas, más del 40% de los alimentos de los venezolanos o para recircular los dineros recibidos por el paralelo de Dolar Today.
La tercera cosa que se me viene a la mente tiene también ver con denuncias hechas tempranamente sobre la estafa que le hacían a Venezuela a través de los dólares para estudiantes y las remesas familiares de CADIVI. El caso está tan interconectado, que “beneficiarios” colombianos residentes en Venezuela ni siquiera iban a Colombia a retirar divisas, sino que lo hacían en Barquisimento y/o Puerto Ordaz. Esto lo ratificó recientemente la mujer con acento santanderiano lamentándose de lo bien que vivía cuando Chávez, recibiendo las remesas que cobraba en Barquisimeto y/o Puerto Ordaz, que gracias a Chávez tenía cédula venezolana, porque ahora lo que buscaba era la pensión de vejez que puede obtener por 40.000 Bs. No se enfoquen en la pensión, que una contraloría eficiente pudiera hacer un muestreo al azar del 1% de los pensionados, tal vez con una discriminación inicial por número de cédula y verificar esta denuncia y profundizar de acuerdo a los resultados, enfoquémonos en que las transacciones de transferencia de divisas se hacían desde Venezuela para Venezuela por supuestos beneficiarios que vivían en Colombia u otro país, qué mecanismos utilizaron, ya que esos mismos mecanismos son con los que se movilizan las divisas inorgánicas y el dinero Venezolano.
1 www.aporrea.org/actualidad/a48955.html
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