onsecomercio&Fedecámaras, de la mano del golpe

Franquicias Imperiales: Dueñas del aparato distributivo

Nuestro sistema de instaurar una revolución de excesiva flexibilidad democrática ha dado píe al fanático entrampado de una frustrada oposición sin autonomía ni autoridad propia; su carácter de sub “orientado” y de subordinado político por y al ente imperial, bien de EEUU o de Europa, le aduce inclinación a sus magnánimos erráticos procedimientos para no coordinar una correcta función política opositora que esté dentro del contexto y orden del hilo constitucional. Priva el ilógico descenso sobre la realidad de una compostura política e impera el querer avasallar por descabellada fuerza y no por la razón de aprender a ganar y a perder cuando así, los errores y los aciertos así den como resultado.

Franquicias dolarizadas y con una cultura capitalizada del pretérito imperfecto político de una inapropiada gobernabilidad de élites de ayer y hoy en franco desgaste, pretenden hacerse de años póstumos del poder sin pueblo y sin la viabilidad democrática del voto; 18 elecciones de consecutivas claras derrotas, les desquicia, les anti-sistematiza un orden y les arruina hasta la más breve y simple credibilidad de sus seguidores ya hartos de continuos fracasos y de siempre exponer su libertad y sus vidas por innecesarios delitos y, en muchas de sus veces, por no decir todas, tomadas como conejillo de India, para al final ser un trivial mal ensayo más, que se va sumando a la interminable eslabonada cadena de lujurias políticas, donde el agraviado no es más, que lo que la alcurnia califica de su peón.

El desmontar todo este aparato “distributivo” e irle desplazando y poniéndole en manos del sí pueblo bien organizado, es el firme y gran objetivo inmediato nuestro a conseguir; porque aunque, llegue a estar en totales manos izquierdas, pero dudosas, y que no son las del pueblo, corre riesgo de caer en manos de grupúsculos posesionados de la cultura de la corruptela aprehendida aún vigente en los entes del Estado y derivados; es un flagelo no vencido ni mucho menos aún derrotado, vive, respira, camina, actúa, tentaculiza y es una de nuestras profundas contradicciones coyunturales al atraso de proyectos inconclusos y de avances políticos en el orden de la ideologización pertinente y bien ahora necesaria.

El país sigue estando en muy buena parte a merced de la burguesía parasitaria y rentista edificada desde la dictadura de Juan Vicente Gómez y con el advenimiento petrolero; la aparición física e instalación del imperio gringo, posó su bota dominante y podría decirse, que hasta hoy todavía influye y tiene puesta un pedazo de su asquerosa suela en nuestra tierra; vale acotar, que no podemos por equis circunstancias librarnos de él, tenemos que vender sin mermar cantidad nuestro petróleo y hasta en condiciones especiales, insólito, pero así, ocurre, y le asumimos como diplomacia, mas, muchísimos, no le compartimos en nada y para nada, pero disciplinamos las firmes políticas de esta revolución liberadora.

Un sistemático peculado se referencia como base en el plano político de una oposición, que se abroga el derecho impositivo de conducir generalidades cotidianas a factor de desestabilidad emocional en cierto porcentaje de sus adeptos, que le construye violencia irracional, permuta la especulación y le esgrime a través su descarado chantaje mediático, configurado éste, desde el sistémico construido por el predominante apoderamiento de medios de comunicación psicoagresivos y del cacheo de la conducta del televidente, oyente, lector e internet-náutico, y, es vigencia actual. Es la industria de la comunicación su herramienta de sustento, su artillería de destrucción y el desequilibrio constante de la paz ciudadana; la zozobra genera una inestabilidad en el compatriota común, siembra la duda constante que la mediatización le fabrica de la mentira psicoanalizada y programada.

Las franquicias no sólo distribuyen alimentos, servicios, materiales u otras cosas de uso, es tan solo una parte del negocio acorazado, mas, el rollizo está en conservar la hegemonía de manejar las masas con la fragancia del virtual telegrama liminal, para que estás sean consumidoras de sus productos en mayor de sus veces hasta innecesarios y para que con agudeza se dejen descarrilar cual borrego por el desfiladero de la irreflexiva rendición a lo neoliberal. Lo conductivo aglutina el proceder y encausa a la pella para hacerle magma sin que siquiera se llegue a enterar de su actuar anti-personal y contra ético-moral.

Organizaciones con fines de excesivo lucro se dan entre sí en el enlace del monopolio y el oligopolio; le adecuan de tal forma que sus intereses individuales no se vean afectados por lo que debiera ser una buena sana competencia, de ahí, que los trust o holding tomen vigencia y se refranen Consecomercio o Fedecámaras o vale cualquier otro, da igual el uso del nombre. Luego así, se van haciendo de los poderes que le suman a una solo causa: capitalizar en grandes cuantías el poder del dinero para emporiorizarse el poder político no socializado que le arrebatan al dueño originario, al pueblo. Así, se hacen de todo el estamento que regulariza todo medio económico, todo medio del examen del pensar, y, por supuesto, todo medio de gobernabilidad civil y militar, y hasta se involucran en lo que ahora denominan narco-paramilitarismo, donde su rentabilidad es mucho más cuantiosa y sin pagos tributarios; por tal vía, se hacen del poder con gran prontitud, en un mundo donde el dinero es quien determina cuan poderoso se puede ser para usar el trampolín a su escala mayor del poder político que todo lo maneja, todo lo repara, todo lo excusa y todo lo encubre. Por eso, al producirse una revolución toda esta componenda se agrupa para tratar de desvirtuar a como dé lugar, que se le destrone de sus poderes y enfilan toda su maquinaria nacional e internacional contra el proceso de depuración. Infinitos réditos moratorios de inmoralidad de grandes, medianos y pequeños burgueses del capitalismo neoliberal se conjuran contra ya 16 años de lucha revolucionaria dándole poder al pueblo.

 

omarpinto47@gmail.com



Esta nota ha sido leída aproximadamente 2085 veces.



Omar Ignacio Pinto


Visite el perfil de Omar Ignacio Pinto para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes:

Comparte en las redes sociales


Síguenos en Facebook y Twitter



Omar Ignacio Pinto

Omar Ignacio Pinto

Más artículos de este autor


Notas relacionadas