Cuando los ricos lloran por los pobres

    Alguien dijo: la política es cambiante…, y vaya que si lo es, últimamente me he conseguido con un extraordinario cambio de táctica política de algunos de los mas connotados lideres de la oposición, su discurso profundamente dramático esta dirigido a defender a los pobres de las terribles colas, del desabastecimiento, del acaparamiento, remarcaje,  etc., casi se rompen las vestiduras al ver tan ignominiosa situación, no soportan ver a su pueblo desesperado buscando aquí y allá los productos necesarios para el diario subsistir, ponen el grito en el cielo por los precios aumentados desmesuradamente y llaman a un cambio de gobierno urgente es decir ¡ya!, es el momento, aunque dicen respetar la Constitución para ellos las condiciones ya están dadas.

            Los ricos que durante los gobiernos neo-liberales de la IV nunca se ocuparon de los pobres con la excepción del rico representante del quinto poder el excandidato presidencial Renny Ottolina que en un arranque de altruismo enseñó a los pobres a no morir de hambre; el adusto e inefable presentador procedió en uno de sus programas a comer una galletita de una muy famosa marca de alimento para perros seguido de la frase que se hizo famosa; “…si a mi me encanta, porque no a sus queridas mascotas?, ¡pruébela!, es deliciosa y verán como los alimenta y los pone fuertes”; por supuesto que la cuña fue exitosa, aumentaron las ventas de perrarina vertiginosamente aunque las mascotas no eran precisamente quienes la consumían ni hacían las colas para adquirirlas.

            Nunca hemos visto como hoy a los ricos políticos estar tan preocupados porque los ricos empresarios quieran derrocar al gobierno con la desestabilización producto de la guerra económica, acaparando e inflando los precios y tratando de crear molestia en el pueblo que es precisamente lo que beneficia a los ricos políticos que lloran por los pobres, llaman ineficiente al gobierno por no poner mano dura en las colas que hace el pueblo, por no permitir que los ricos empresarios sean saqueados, las tácticas de surtir día a día un solo negocio con algún producto que escasea es también culpa del gobierno, quien informa a los bachaqueros del próximo punto de distribución seguramente dirán que es el gobierno, porque al decir de los lideres opositores a quien le convienen las colas y las guarimbas es al gobierno, ¡cosas veredes!, diría Don Quijote.

            Me preocupa que estas pequeñeces sean ignoradas por el pueblo, sobre todo por la juventud que es fácilmente manipulable ya que ellos no conocen la realidad que vivimos en los 40 años de gobierno de los ricos, es tarea de todos recordarlas, los medios progresistas deben adelantar junto al gobierno campañas de orientación y culturización donde pongamos de relieve los peligros que se nos ciernen si por alguna casualidad estos ricos explotadores políticos que hoy lloran por los pobres y sus aliados los ricos empresarios llegaran otra ves a gobernarnos. 

 

 

 

 



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Gonzalo Ochoa Díaz


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