22 Sep. 2014.- Los rubros tradicionales para la temporada navideña están garantizados en el país, a través de un trabajo planificado entre empresa privada y el Gobierno, indicó este lunes el presidente de la Federación de Industriales Pequeños, Medianos y Artesanos de Venezuela (Fedeindustria), Miguel Pérez Abad.
"Hemos venido trabajando con el Gobierno, organizando y planificando los últimos meses del año, sobre todo noviembre y diciembre, períodos en que la familia tiene recursos derivados de sus utilidades y hay una presión del consumo que se incrementa", declaró a Unión Radio.
Explicó que, por ejemplo, el sector juguetero ya ha recibido divisas para importaciones de manera progresiva, al igual que productos alimenticios para la elaboración de la hallaca, el plato típico de la época.
Asimismo, comentó que este miércoles industriales del gremio recibirán piezas para la fabricación de bicicletas, que estarán listas para la época decembrina.
En ese sentido, indicó que han conversado con el Ministerio de Comercio para iniciar trámites y apurar pasos para la entrega de productos que ya están en los puertos, a fin de que la industria pueda responder pronto y de manera eficaz a los compromisos para el cierre del año.
Además, indicó que el gremio prepara un sistema de monitoreo para velar porque los precios finales de los bienes respeten la regulación.
Fondo para la gasolina
Por otro lado, Pérez Abad indicó que desde la Federación respaldan un eventual ajuste del precio de la gasolina, pues consideran que el subsidio sobre ella no beneficia igualmente a todos los sectores y especialmente a la población más vulnerable.
Explicó que mientras un trabajador que no tiene carro puede gastar entre 200 y 300 bolívares a la semana en transporte público, una persona con una camioneta último modelo con apenas cinco bolívares puede llenar el tanque de su vehículo y desplazarse durante varios días.
"Quienes no son consumidores de combustible no reciben prácticamente el beneficio del valor de la gasolina, que no cubre ni los costos operacionales", comentó.
Consideró entonces que un precio justo sobre este hidrocarburo debe establecer una utilidad razonable y propuso que el excedente que se genere sirva para crear un fondo nacional para invertir en el transporte público, financiar nuevos sistemas e implementar el proyecto de gas natural para los autobuses.
Estimó que el ajuste no debe traducirse en aumento de tarifa, pues en la estructura de costos de los transportistas, el combustible no alcanza ni 1% de los costos. Por ello, planteó que el fondo sirva para financiar repuestos en insumos para los conductores.
"Nos parece importante armonizar el precio de la gasolina para que al final se beneficie la mayoría del pueblo", expresó.
