06 de Abril.- La eficiencia operativa de los elementos que participan en las llamadas guarimbas terroristas, generadas en algunos municipios del país dominados por la oposición desde mediado de febrero, revelan que existe un componente entrenado para tales fines, alertó el periodista José Vicente Rangel durante su programa transmitido este domingo por Televen.
Las llamadas guarimbas se han convertido en reductos violentos, que le sirven a la ultraderecha como escenarios de vandalismo y acciones fascistas. Los resultados: 39 personas asesinadas. 608 lesionadas, además de daños materiales a la nación.
En la sección Los Confidenciales, Rangel mencionó que estas acciones tienen un grado de organización y de capacidad de movilización que, de acuerdo a órganos de inteligencia, "no es característica de los movimientos venezolanos, de militantes corrientes de partidos y de estudiantes".
"Existe un componente nuevo, que explica la prolongación en el tiempo de esa actividad subversiva y su elevado grado de violencia", recalcó el exvicepresidente de la República.
Asimismo, mencionó que según informaciones provenientes de Colombia, hubo en meses previos a los hechos violentos, una movilización de grupos ligados a la violencia colombiana en la frontera, con experiencia en combate y altamente entrenados, con vínculos paramilitares.
"La información indica que parte de esas unidades aguardaban instrucciones para ingresar al territorio venezolano", dijo, al tiempo que recalcó que estas instrucciones se dio de forma gradual y discreta para no alertar a las autoridades venezolanas.
"Esto explica la movilidad de las guarimbas y de las organizaciones de variado recursos".
Rangel hizo referencia a algunos detenidos de nacionalidad colombiana que han manifestado, en interrogatorios, que las unidades colombianas cuentan con oficiales retirados y reservistas, los cuales entrenan a personal venezolano en los estados Táchira y Zulia.
Reiteró que detrás de este tipo de acciones, de acuerdo a informaciones provenientes desde Bogota, está la mano de el expresidente colombiano Álvaro Uribe, quien, denunció, ha elaborado un esquema de trabajo para influir sobre la situación venezolana.
"Considera indispensable, para los intereses de Colombia, intensificar la participación del alto cuadro que se presenta en Venezuela, fortaleciendo los equipos de apoyo a la subversión. El plan comienza con la instalación de unidades integradas por paramilitares vinculados a Uribe a lo largo de la frontera Apure, Amazonas, Táchira y Zulia", indicó.
Señaló que pese a que los focos de violencia han disminuido y se ha observado deserciones de los participantes, se ha endurecido el comportamiento en los lugares donde la violencia fascista ha estado presente.
