16 de noviembre de 2013.- Hablar de movimientos sociales, comunas y Poder Popular, implica descubrir, en el fondo, que el planteamiento de estas organizaciones apunta no sólo a la construcción de un nuevo sistema de relaciones sociales, sino también a una nueva forma de comunicarnos, y, sobre todo, de reconocernos, identificarnos y valorarnos como individuos portadores de una cultura propia, aún viva, y hoy más que nunca preservable.
En este sentido, la 1ra Muestra de Cine Subversivo Trujillo 2013, tendrá como fin la creación de un espacio donde los creadores audiovisuales de los distintos movimientos sociales, comunas u organizaciones populares afines, expongan sus luchas, sus acciones sociales que contemplan la transformación de su entorno y realidades, sus contradicciones, todo esto con un sentido crítico-reflexivo, en el marco de la construcción de una sociedad diferente a aquella propuesta (y muchas veces impuesta) por la lógica del capital.
No se trata meramente de un tipo de realización audiovisual que denuncie o que sea particularmente contestataria, o, lo que sería peor, reaccionaria. No. El audiovisual subversivo no necesariamente debería circunscribirse a estas categorías, sino que propone una subversión del lenguaje, del hecho cultural; una poética del registro que tanto movimientos sociales, como comunas u otras organizaciones realizan en su propia intimidad, en esa intimidad comunal que los aglutina y direcciona, y que tiene sus propios rostros e historias, su propio contenido.
El hecho de organizarse para realizar un filme comunitario, en cualquier género, ya es un hecho subversivo. Un campesino hablando de la experiencia de sus manos al ordeñar una vaca, es por sí mismo subversivo, dado que expone ante un determinado público una didáctica, una estética y una poética diferente a la expuestas por la industria cultural de masas, cuyos cánones sólo cumplen el propósito de estandarizar la condición humana, y desnaturalizar nuestros estilos y formas de vida locales, nuestra propia mirada del mundo.
Por lo demás, una muestra de este tipo permite abrir espacios comunicantes, de reflexión y de aprendizaje, para intercambiar experiencias relacionadas con la producción audiovisual desde las organizaciones de base, sean Consejos Comunales, Comunas o Movimientos Sociales, con el fin de hacer de la comunicación un hecho estético y profundamente ético.
