Victor Álvarez: Experiencia demuestra que ausencia estatal desata efecto devastador del mercado

Victor Álvarez

Victor Álvarez

13 de febrero de 2013.- Hay suficientes experiencias documentadas en las cuales se demuestra que el repliegue del Estado, la ausencia de controles y regulaciones, desata el efecto devastador que tienen las fuerzas ciegas del mercado, destacó el economista e investigador del Centro Internacional Miranda (CIM), Víctor Álvarez.

Las capacidades de intervención pública, oportuna, inteligente y dinámica del Estado, son absolutamente necesarias en cualquier economía, sea el país que sea. “Esa ausencia incuba los peores desequilibrios. Podemos ver sus consecuencias, actualmente en la Unión Europea”, dijo.

Explicó que hay un amplio abanico de formas de intervención del Estado que se complementan y se potencian, pero que también se pueden anular o mediatizar si no hay un enfoque global de esos mecanismos de intervención.

Sobre la transformación del modelo económico criollo, Aseguró Álvarez, que uno de los grandes retos es incrementar el número de unidades productivas. “Esta es la clave para conjurar las amenazas de escases y acaparamiento que caracterizan las economías rentísticas”.

Comentó la ventaja de contar con una economía que ante escenarios desfavorables pueda importar, sin embargo, explicó que se trata de lo que algunos llaman:”la maldición de la abundancia”.

Recordó que el Plan de la Nación Simón Bolívar declaró el carácter socialista de la Revolución y empezó a echar los cimientos de la transformación de ese capitalismo rentístico.

Sobre la Ley de Costos y Precios Justos y los nuevos precios fijados a 19 productos por la Superintendencia Nacional de Costos y Precios (Sundecop), Álvarez aseguró que el impacto está a la vista y se han producido brotes de escasez, “pero más como una jugada para desestabilizar, que como decisión contraria a las leyes de la economía”.

Destacó que el mayor reto de la Sundecop es administrar la Ley de manera inteligente y con información actualizada. “La idea es que se tomen decisiones oportunas y ampliar la cobertura del control más allá de estos productos iníciales”, acotó.

Finalizó subrayando que si algo distingue la propuesta del socialismo venezolano es la necesidad de impulsar una nueva economía social: una nueva economía comunitaria que este bajo el control de los trabajadores directos y la comunidad organizada.


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