1 de febrero de 2013.- El oficial a cargo de la toma del Palacio de Miraflores durante el 4 de Febrero de 1992  resalta, 21 años después de la rebelión que cambió la historia contemporánea de Venezuela, la influencia determinante del 27 de Febrero de 1989 en la insurrección militar                                      

“Los gobiernos son los responsables de que los pueblos asuman las armas cuando los cambios que están pidiendo no se dan”, John Fitzgerald Kennedy.

“El Plan Económico Global” o “programa de choque”, como lo denominó su propio artífice, el expresidente venezolano Carlos Andrés Pérez, ha implantarse durante su segundo período de Gobierno, en 1989, despertó un profundo malestar en un pueblo que se vio obligado a salir a las calles para manifestar su descontento contra una más de las recetas del Fondo Monetario Internacional (FMI) aplicadas en el país por las administraciones adeco-copeyana.

“Mi misión no es taparle el error a los políticos que hacen las cosas indebidas”, señala el capitán Ronald Blanco La Cruz, al recordar que cuando se usaron las armas para masacrar al pueblo que se reveló contra un plan económico que contemplaba el aumento del precio de la gasolina y todos los servicios públicos, la devaluación progresiva del bolívar, la liberación de las tasas de interés y de todos los precios; se aceleró en el seno de las entonces Fuerzas Armadas el movimiento insurgente.

A 21 años de la rebelión militar del 4 de Febrero de 1992, quien para ese entonces estuvo a cargo de la toma del Palacio de Miraflores y la captura del Presidente de la República, desde su oficina en la sede central de la Universidad Nacional Experimental de la Fuerza Armada, en la ciudad de Caracas, en la Dirección de Investigación y Postgrado, reafirma el sentir de la oficialidad que se alzó en armas aquella madrugada de febrero: “nosotros no nos habíamos formado en esta patria como Ejército para matar al pueblo”.

¿Cómo surge el Movimiento Bolivariano Revolucionario 200, lo que podría ser como una fuerza política dentro de la institución armada?

Toma forma después del 27 de Febrero de 1989, antes se dieron reuniones pero no fueron tan definitivas como las que se generaron a partir de esta fecha, quizás por toda la connotación que tuvo el escenario de muerte en el que el Ejército junto a la Guardia Nacional habían generado toda esta situación, de alguna manera generó un malestar interno por haber sido utilizada la fuerza para reprimir al pueblo en ese momento.

La participación nace a lo interno dentro del Ejército, bajo el nombre de Ejército Bolivariano Revolucionario 200, y luego pasa a Movimiento Bolivariano Revolucionario 200 cuando se da la incorporación de ciudadanos externos a las Fuerzas Armadas, pero compartían la misma preocupación.

¿Quién impulsó su nacimiento?

Este movimiento surge por iniciativa del Comandante Chávez, líder del proceso; se da con la búsqueda y captación de jóvenes oficiales con deseo de dar su mayor aporte al país, movimiento que se concreta el 3 y  4 de Febrero con la rebelión militar.

¿Por qué usaron las armas?

Cualquiera puede cuestionar el uso de las armas, pero nosotros tenemos los argumentos. Antes de esa rebelión se dio el 27 de Febrero, cuando se usaron  los fusiles contra el pueblo; el mismo pensamiento bolivariano y todo el legado del Libertador siempre nos alertaba, “los militares usando la espada en defensa del pueblo, de las garantías sociales del pueblo”.

Nosotros no nos habíamos formado en esta patria como Ejército para matar al pueblo, al contrario, luchar por la independencia, que fue lo que se hizo a lo largo del camino, las Fuerzas Armadas han salido a defender nuestras fronteras, han ido a otros lugares a contribuir con el proceso de paz, pero nunca a invadir a nadie, ni causarle daño a pueblo alguno.

27 de Febrero de 1989 ¿detonante del 4 de Febrero de 1992?

El 27 de Febrero se convierte en un acelerador de esa situación, se presenta la oportunidad de apoyar al pueblo y decir que no todo el mundo estaba de acuerdo con que se reprimiera a la población que protestaba por unas medidas contrarias a las anunciadas  en la oferta electoral. Mi misión no es tapar el error de los políticos que hacen las cosas indebidas, mi función es defender la frontera, cumplir con actividades de carácter cívico que ordene el Gobierno, pero para ayudar al pueblo.

Desde el año 1984 se creó la Comisión para la Reforma del Estado (Copre), comisión que fue postergada y con ella las demandas de referéndum, la participación popular, y la transferencia de recursos a las comunidades, situación que complicó aún más el panorama y pese a la conformación de un Consejo Consultivo para atender los cambios más apremiantes, la revolución iba hacia delante.

Un escenario propicio para la rebelión

Contrario al golpe de Estado gestado en abril de 2002 contra el actual presidente de la República, Hugo Chávez, el generalizado malestar social como consecuencia del paquete económico y la represión de 1989, sumado al grado de desprestigio del Gobierno de Pérez crearon las condiciones objetivas y subjetivas para la rebelión cívico-militar de febrero, a juicio del capitán Blanco La Cruz.

“Era una cosa totalmente diferente, un Gobierno totalmente desprestigiado, y en el caso de Chávez, un presidente tratando de enderezar el país”, apunta al señalar que los autores del golpe de 2002, quienes no asumieron la responsabilidad de esa acción ante el país, pretendieron vulnerar un liderazgo con más de 60 por ciento de respaldo popular, fortalecido en diferentes consultas populares.

Mirar la crisis económica y social por la que atraviesa Europa, es ver la Venezuela de 1989, cuando un Gobierno que recién se instalaba implementó una serie de medidas económicas, como condición del FMI, y en respuesta al descontento sacó la fuerza pública a las calles para oprimir al pueblo.