3 de enero de 2013.- Excombatientes argentinos de la guerra de las Islas Malvinas presentaron este jueves una carta en la embajada de Gran Bretaña en Buenos Aires en la que exigen que este país se siente a negociar con Argentina sobre la soberanía del archipiélago.
“La carta fue presentada por excombatientes con el respaldo de Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, organizaciones sociales y gremiales, y va en línea con la misiva publicada este jueves por la presidenta Cristina Fernández en la que pide establecer una mesa de diálogo que respete las distintas resoluciones de la ONU sobre el tema, que lo instan a negociar sobre la soberanía de las islas”, informó el corresponsal de teleSUR en Argentina, Edgardo Esteban.
Los excombatientes rechazan que Gran Bretaña continúe con la militarización de las islas, "teniendo en cuenta que desde 1985 se ha establecido en la isla Soledad una gran base militar de la OTAN y que su país ha promovido el equipamiento de la misma con arsenal militar de gran poder de fuego", se destacó en la carta.
En ese sentido solicitaron "iniciar prontamente el diálogo con Argentina para resolver pacíficamente la controversia de soberanía y, mientras tanto, que cesen las violaciones al tratado de Tlatelolco, que retire el material nuclear del Atlántico Sur y que finalice la militarización del mismo".
En concreto, les preocupa que se siga avanzando en la militarización del Atlántico Sur, donde se sigue entrenando en una base a militares que luego van hacia Irak y Afganistán.
Por otro lado, Esteban recalcó que la realidad demuestra que las islas Malvinas tiene uno de los mayores ingresos per cápita del mundo y que está habitada por 1003 habitantes implantados por el Reino Unido, mientras que el resto son ciudadanos que llegan al archipiélago por los buenos negocios de la pesca y el petróleo.
“La decisión de los habitantes no debe influir en la decisión política de sentarse a negociar sobre un enclave que pertenece a Argentina”, resaltó.
Además sostuvo que “la elección de las autoridades legislativas, como las relaciones exteriores y comunicaciones de las Malvinas siguen dirigidas por Gran Bretaña”, y no por ciudadanos, como afirma Londres, que argumenta la autodeterminación de los isleños para rechazar una mesa de diálogo con Argentina.
Según Esteban, los británicos están interesados en las islas por sus recursos naturales y su ubicación cercana a la Ántartida, lo que les permitiría reclamar una porción del continente blanco cuando se discuta su delimitación y se abra a exploraciones petroleras, mineras y de distinto tipo.
