13 de Noviembre.- Los ministros de Finanzas de la Eurozona pidieron a España aplicar más recortes con el objetivo de reducir aún más el déficit público y le sea concedido el rescate financiero a la banca del país.
El Eurogrupo hizo el llamado luego que la Comisión Europea pronosticara que España no cumplirá con los objetivos de reducción de déficit trazados para 2012 y los próximos años, a pesar de las duras medidas de austeridad que ha puesto en marcha durante el año.
"Animamos a las autoridades españolas a seguir aplicando la estrategia fiscal acordada con resolución", dijo Jean-Claude Juncker, presidente del Eurogrupo, citado por EFE.
Se prevé que el primer desembolso del rescate financiero aprobado para la banca española se haga efectivo a principios del mes de diciembre, no obstante, antes el Eurogrupo hará una evaluación sobre las políticas fiscales de España, informó el comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn.
Juncker manifestó que este rescate financiero "se utilizará para recapitalizar los bancos que ya son propiedad del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), incluyendo BFA-Bankia".
De acuerdo a las previsiones macroeconómicas de la Comisión Europea sobre España para los próximos dos años, se prevé que este país cierre 2012 con un déficit público de 8% del Producto Interno Bruto (PIB), en 2013 llegaría a 6% y para 2014 volvería a subir a 6,4%.
De cumplirse esos pronósticos, España no alcanzaría los objetivos de reducción de déficit fijados por Bruselas, que prevén rebajar ese indicador al 6,3% este año, al 4,5% en 2013 y al 2,8% en 2014.
En 2011, España cerró con déficit público de 8,5%. Las autoridades de ese país europeo se mantienen optimistas y prevén cerrar 2012 con 6,5%.
Para lograr esto han ido aplicando de manera progresiva severas medidas de austeridad que incluyen aumento del Impuesto al Valor Agregado (IVA), la reducción a 50% de la tasa de reposición de la prestación por desempleo a partir del sexto mes de paro, la eliminación del bono de navidad a funcionarios y altos cargos, además de la privatización de los servicios asociados al transporte ferroviario, portuario y aeroportuario.
A esto se le suman los 10.000 millones de euros recortados previamente a la educación y la salud .
