Caracas, 24 de septiembre de 2012.- Unos 21 propietarios de inmuebles declarados de utilidad pública para la construcción de viviendas, firmaron este lunes un acta con la Procuraduría General de la República a fin de iniciar el arreglo amigable que conduzca a la adquisición plena del espacio y establecimiento y pago del precio justo.
Al acto, desarrollado en Caracas, asistieron la procuradora, Cilia Flores; y el ministro de Estado para la Transformación Revolucionaria de la Gran Caracas, Francisco Sesto.
El año pasado, con ocasión del inicio de la Gran Misión Vivienda Venezuela y la emergencia habitacional generada por las lluvias, el Estado decretó la adquisición de terrenos e inmuebles en desuso o subutilizados, que fueron declarados de utilidad pública para destinarlos con prioridad a la construcción de casas.
En el acto, Flores resaltó que el Gobierno del presidente Hugo Chávez ha asumido la responsabilidad no sólo de garantizar viviendas al pueblo, en particular a los más desposeídos, sino que cumple con los derechos de los propietarios de los inmuebles donde hoy se construyen las casas de interés social.
Señaló que con el acta firmada se inicia la fase de arreglo amigable con miras a alcanzar equidad y justicia social. Además, garantizó que el Estado efectuará el pago del justiprecio a todos los propietarios de esos bienes.
Por su parte, Sesto destacó que el grupo de 21 propietarios representa casi un tercio de la totalidad de los inmuebles privados sobre los que la Oficina Presidencial de Planes y Proyectos Especiales (OPPPE) está levantando viviendas en la Gran Caracas. Al mismo tiempo, se desarrolla la negociación con el resto de los dueños.
Explicó, además, que el método para definir el justiprecio está establecido legalmente, e incluye la actualización, de acuerdo a un método fijado por el Banco Central de Venezuela (BCV), del precio que conste en el último documento de compra-venta del inmueble, con fecha superior a un año.
Sesto resaltó que el propietario tendrá así no sólo un pago justo, sino la satisfacción moral de haber contribuido a dotar de viviendas dignas a personas que lo perdieron todo y que antes residían en barrancas o en quebradas.
El ministro de Estado para la Transformación Revolucionaria de la Gran Caracas agradeció a los firmantes, en nombre del pueblo venezolano, por haber aceptado el acuerdo amistoso y se comprometió a acelerar los pagos correspondientes.
