11/02/12.-El sábado 4 de febrero se produjo la ruptura de una tubería del complejo petrolero Jusepín, en el estado Monagas. El crudo corrió por el cauce del río Guarapiche y mantiene contaminado este afluente a lo largo de decenas de kilómetros y sigue extendiéndose.
Temen que, al llegar al río San Juan, alcance el Delta del Orinoco y así el crudo llegue al océano Atlántico.
El derrame constituye una amenaza ambiental, pero también afecta gravemente a los habitantes de la población de San Vicente, la más afectada por bote de crudo. 400 productores que viven del cultivo de tomate y plátano, están a punto de perder su cosecha.
Ya se han visto muertos decenas de especímenes de la fauna a las orillas del río. Algunos reportes indican que otros reptiles también han perecido por la contaminación.
Los productores locales se han volcado a colaborar con la limpieza del afluente, pero lo hacen sin protección ni equipos adecuados, lo que puede atentar contra su salud.
En Maturín, 80% de la población se encuentra sin agua potable, pues el derrame contaminó la planta potabilizadora del estado Monagas. Las clases fueron suspendidas de manera indefinida desde el jueves, según decreto del gobernador, José Gregorio Briceño, que también decretó el estado de emergencia.