Bogotá, julio 31 - Largas filas se vieron ayer en las sedes de la Registraduría Nacional en Colombia, por cuenta de los miles de ciudadanos que se apresuraban a reclamar su nueva cédula.
Todos los trámites bancarios, notariales y administrativos sólo se podrán hacer con el nuevo documento, que es la cédula amarilla con hologramas.
De nada sirvió la petición que, según el Ministerio del Interior, le hizo la Registraduría al Gobierno el pasado martes para que se extendiera este plazo.
De acuerdo con el registrador, Carlos Ariel Sánchez, "la semana entrante y la que sigue va a haber congestiones y dificultades, pero habrá el personal adicional para atender dichos problemas".
Sánchez también aclaró que la Registraduría seguirá realizando el trámite de renovación de cédula para los cerca de 50.000 ciudadanos que ni siquiera han solicitado su nuevo documento.
"La cédula pierde vigencia, pero la función de la Registraduría de seguir recibiendo y renovando a las personas que deseen renovar gratuitamente sigue", enfatizó Sánchez.
Muchas voces se escucharon ayer en las filas de los apresurados ciudadanos que deseaban reclamar su nuevo documento.
"¿Verdad que dieron plazo hasta noviembre?", preguntó una afanada señora en la sede de la entidad en Bosa, en la capital. "No señora, es solo hasta hoy", le respondió enfáticamente el vigilante que daba los turnos para que los ciudadanos ingresaran por su nueva cédula.
En otra sede de la Registraduría, se escucharon los reclamos de varias personas sobre el trámite de renovación de la cédula.
"Hace dos años la solicité y siempre que vengo me dicen que no ha llegado y que no ha llegado, y la necesito para reclamar la pensión de mi mamá", comentó María del Carmen Pita, quien finalmente obtuvo una certificación del trámite.
