La Casa-Hogar Negra Hipólita fue fundada en 2006, en un convenio entre la citada misión y la Universidad Nacional Experimental Politécnica de las Fuerzas Armadas, para dar albergue a niñas en situación de calle. Pero las jóvenes se criaron y formaron musicalmente en el conservatorio y casa-hogar Nuestra Señora de Guadalupe de La Pastora desde que llegaron allí a los 4 y 3 años de edad.
Rolandy, joven interpretante de la casa-hogar de la Unefa, estudia segundo año de bachillerato, estudia piano desde los 3 años de edad y ha ofrecido conciertos en 23 países, ganando premios como el Angel Sauce. Interpretó un joropo de Moisés Moleiro. Suárez, quien estudia cuarto año de bachillerato y también está albergada en la casa-hogar de la Unefa, interpretó "Marisela" de Díaz Peña. Estudia piano desde los 5 años de edad y también ha ofrecido conciertos en 23 países.
Sobre ellas, hemos encontrado un interesante artículo de Jorge Hernández, publicado en el diario El Universal el 23 de junio de 2006, que compartimos con ustedes.
La Pastora alberga a niñas prodigio que tocan el piano
En un lugar muy emblemático de Caracas se encuentra una casa
colorida donde se cuidan a niñas de distintas edades con un gran oído
musical, bajo la tutela del director Roberto Mora y la ayuda de su
coordinadora Milagros de Mora.
Ese inmenso hogar, denominado Nuestra Señora de Guadalupe, está
ubicado en la parroquia La Pastora y sus niñas han ganado premios
nacionales e internacionales haciendo grandes sacrificios para
participar o viajar.
Desde la inauguración de este refugio, el 22 de octubre de 1995,
sus niñas se han dedicado a recibir clases de piano por parte del
profesor Roberto Mora desde corta edad. "Linda Suárez, con cuatro años,
y Rolandy Colmenares, de tres, fueron las dos primeras niñas en llegar
a la casa hogar. Luego se integran al grupo Greymar Pereira, Sandra
Yudith Pabón García y Luz Aurora Barrios, esta última sólo recibe
clases en la casa", indicó Mora.
El 3 de junio de este año Luz Aurora Barrios, de nueve años,
participa en el VII Concurso de Piano Angel Sauce en el platillo
protocolar del Teatro Teresa Carreño, categoría primer nivel, y gana la
competencia. En la categoría tercer nivel del mismo concurso ganó
Rolandy Colmenares.
Con varios años recibiendo clases de piano "he aprendido muchas
cosas y seguiré adelante con la ayuda del profesor Roberto Mora",
expresó Barrios, quien sabe como distribuir su tiempo entre las clases
de piano y el colegio.
Las hermanas Linda Suárez y Rolandy Colmenares, ahora con 15 y 14
años respectivamente, "fueron las primeras niñas en ganar el Premio
Internacional Inacer, ellas llegaron una noche a la casa y se quedaron
toda la vida conmigo", dijo Roberto Mora.
Este hogar alberga diez niñas fijas y cuatro que sólo van a recibir
clases y se devuelven a su casa. Linda Suárez ha vivido once años en el
hogar Nuestra Señora de Guadalupe y en dos años se gradúa como
"profesora ejecutante de piano y podrá seguir transmitiendo sus
conocimientos a otras generaciones", agregó Mora.
"Llegue a la casa hogar a los cuatro años y desde niña me gustó el
piano porque escuchaba a mi papá componer sus canciones y me empezó a
gustar el sonido, él me sentó frente al piano, se dio cuenta de que
tenía talento y oído musical para esto y me enseñó a tocarlo desde muy
joven", dijo Linda Suárez. En el Festival Internacional Latinoamericano
de Piano del año 2003, realizado en República Dominicana, Suárez
participó por primera vez y ganó mención honorífica.
"El año siguiente participé y me dieron el primer lugar. Luego
concursé en el Premio Angel Sauce 2005 y gané. Con mi hermana, Rolandy
Colmenares competí en el Concurso a cuatro manos Herty Hass el 15 de
diciembre del año pasado y otra vez volvimos a ganar el premio", agregó
Suárez.
Esta joven promesa del piano clasificó en las competencias
preliminares del Premio Harriet Serr y competirá hoy en la final del
concurso a realizarse en el colegio Emil Friedman, ubicado en Los
Campitos. "Voy a tocar el concierto 21 de Mozart en do mayor, Opus
467", informó Suárez, estudiante de 8vo grado del Instituto Nazaret de
la Av. Baralt. Por su parte, Rolandy Colmenares afirmó que tocaba el
piano "desde que tenía tres años, mi papá me sentó, me tocó los dedos y
me fue enseñando a leer las partituras. Roberto me iba nombrando las
notas y yo se las respondía en el piano. Yo aprendí a tocar mi primera
pieza a los siete años y me encanta tocar el vals de Chopin".
Colmenares estudia en las mañanas sexto grado en la escuela Antonio
Bamonde, en La Pastora, y por las tardes asiste a la Escuela de Música
Prudencio Esaa de Montalbán, lugar donde recibe clases teóricas y
prácticas de piano. "Me he ganado dos premios importantes, el Angel
Sauce 2006 en la categoría tercer nivel y el Festival de República
Dominicana en el 2001", agregó Colmenares. Greimar Pereira, de once
años, ganó en Dominicana en el año 2005. Y Sandra Pabón es la figura
que promete seguir los pasos de sus hermanas en competencias de piano
fuera de Venezuela.
Puedes ver otros en radiomundial.com.ve