El mono tramposo
Los Versos del Peregrino
Llegaron las elecciones
en todo el reino animal,
y el mono rey de la fiesta
quedó jefe electoral.
Soy el mono, soy quien manda
a mí nadie va a mandar
soy el jefe de la vaina
de todo este matorral.
Estas son las condiciones
para la contienda actual,
el que se ponga tramposo
lo raspo y voy a sacar.
inscriban sus candidatos,
de la parcela o lugar,
y no quiero padrinazgo,
o los voy a reventar.
El discurso fue emotivo
todos querían jugar,
el juego de ese gran mono
con esa labia ejemplar.
¡Que decente! decían unos
ese si sabe mandar,
pero algunos no creían
que todo fuera tan real.
El chivo junto a la garza,
el gallo y todo animal,
contentos todos estaban,
por poder participar.
La tortuga y el conejo
el famoso cardenal
y el zamuro dijo !NO!
ese mono No es cabal.
El sapo, el zorro y el tigre,
el camaleón vienen ya,
con su trampa acostumbrada
escondida en el morral.
Son la derecha del monte
que siempre quieren mandar
no le dan paso a más nadie
a menos que sean del clan.
El chiguire y el cochino
la serpiente envenená
ese es el grupo contrario
de la orilla é la quebrá,
esos tampoco permiten
que compitas si no estás,
en ese selecto grupo
de la izquierda acomodá.
Ya comenzó la contienda
y en la sala electoral,
prohibieron al venado
a la lechuza pintá,
al conejo y a la vaca
a la tortuga estampá,
su firma para inscribirse
porque no aparecen Ná.
El mono que era un gran limpio
no tenia casa ni ná,
ahora ostentaba un carro
casa y moto Pá paseá.
Una camioneta grande
dos lanchas en la quebrá,
y tres araguatos grandes
que lo iban a cuidá.
Así empezó la elección
y claro iba a terminá
ganando el tigre y el sapo,
el camaleón por acá.
El chiguire y el cochino
la serpiente acaudalá
que son los mismos de siempre
que pactan para mandá.
Nada cambio allá en la selva
todo igual se iba a quedá,
la única diferencia
era la desigualdad.
El mono rico y más fuerte,
la culebra rica y más,
El tigre más poderoso,
y el camaleón pinta y más.
El zorro junto al cochino
a la playa fue a pará,
a beber whisky sabroso
con carne en vara y demás.
El resto de los animales
que querían participá
le dijeron: ¡PÁ LA OTRA!
porque en esta !YA NO VAS!
Ya se marcha el peregrino
que a la selva fue a observá,
como joden al pendejo
cuando este no tiene ná.
Mejor me voy Pá la casa
a ponerme a reposá,
y no ver tanta injusticia
ni tanta trampa pactá.
La culpa no es del Mono, sino de quien le da el garrote.
Marea Socialista, Hasta la Victoria Siempre.
Josel_ibrahin19
Josel_ibrahin2009@hotmail.com.